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Este fin de semana cuatro incidentes aéreos causaron conmoción en Estados Unidos y México. El primero ocurrió el jueves alrededor de las 21 horas en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM), cuando un avión de carga de la firma AeroUnión se vio obligado a cancelar el vuelo que emprendió con destino a la ciudad de Guadalajara tras registrarse una falla en uno de sus motores.
Los otros dos percances ocurrieron este viernes en Estados Unidos en las ciudades de Chicago y Florida. El primero ocurrió a las 14:35 (hora local) cuando el vuelo 383 de la aerolínea American Airlines, con destino a la ciudad de Miami, fue detenido en la pista del aeropuerto internacional O'Hare de Chicago por un problema durante el despegue. La Administración Federal de Aviación (FAA por sus siglas en inglés) indicó que se trató de una "avería incontrolable en un motor" del Boeing 767, lo que dejó un saldo de por lo menos ocho heridos.
Más tarde, alrededor de las 18:00 (hora local) un avión de la empresa de paquetería FedEx, procedente de Memphis, se incendió mientras aterrizaba en el Aeropuerto Internacional de Fort Lauderdale-Hollywood. De este incidente, controlado a los pocos minuos del aterrizaje, no hubo ningún herido y la carga de la empresa parecía estar intacta. La Junta Nacional de Seguridad en el Transporte inició una investigación para esclarecer este hecho.
Por la tarde del viernes autoridades de Gran Bretaña solicitaron a un avión nuevo de la empresa mexicana Volaris aterrizar en el aeropuerto de Glasgow Prestwick, Escocia, esto debido, probablemente, a una pérdida temporal de la comunicación de la nave que realizaba un vuelo no comercial.
Con información de AP
msl
