Más Información
San José.— El gobierno venezolano y la opositora Mesa de Unidad Democrática (MUD) acordaron ayer iniciar un diálogo político el próximo domingo 30 de octubre en la Isla de Margarita, lo que no fue bien recibido por todos los sectores de la oposición.
Tres delegados del gobierno —el diputado Elías Jaua, el diplomático Roy Chaderton (ex embajador en México ) y el alcalde del municipio de Libertador, Jorge Rodríguez— se reunieron ayer con el secretario ejecutivo de la MUD, Jesús Torrealba, y en ese encuentro se decidió abrir las negociaciones.
Es una “nueva fase de la lucha del pueblo venezolano por la democracia y por la libertad”, para la restauración “plena” de la democracia, dijo Torrealba, al hacer el anuncio.
El acuerdo fue posible gracias a la mediación del Vaticano —en la figura del emisario papal, monseñor Emil Paul Tscherrig— la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) y los ex presidentes José Luis Rodríguez Zapatero, de España; Martín Torrijos, de Panamá, y Leonel Fernández, de República Dominicana.
En un comunicado, Tscherrig precisó que la reunión transcurrió “en un clima de respeto, cordialidad y voluntad política para hacer avanzar este proceso que tiene como objetivo (...) la superación de las coyunturas económicas, sociales, políticas, fundamentales para la convivencia democrática que requiere la sociedad venezolana”. En el mismo documento, el ex presidente colombiano Ernesto Samper, secretario general de la Unasur, agradeció la voluntad política de “todos y cada uno de los que hicieron posible este avance sustantivo”.
Divide diálogo a la oposición. Sin embargo, el anuncio del diálogo no fue bien recibido por todos los sectores de la oposición venezolana.
“Inaceptable”, escribió en su cuenta de Twitter la venezolana María Corina Machado, una de las más importantes dirigentes opositoras.
“Ayer, toda la oposición acordó la rebelión y la destitución de Maduro mañana. Otra vez un ‘diálogo’ para salvar a Maduro?”, escribió, en referencia a la sesión realizada el domingo en la Asamblea Nacional.
Señaló que el alcalde Jorge Rodríguez fue “comandante” del ingreso de una turba chavista a la Asamblea para reventar la sesión del domingo, y ahora “es el vocero del régimen para el diálogo”.
Indicó que ella se enteró por televisión de “que algunos partidos de la oposición aceptan iniciar un diálogo auspiciado” por ese grupo de mediadores, “sin participación” de la OEA.
Los opositores Henrique Capriles, gobernador de Miranda, y Antonio Ledezma, alcalde metropolitano de Caracas en arresto domiciliario, confirmaron haberse enterado también por televisión sobre el acuerdo.
“En Venezuela no se ha iniciado ningún diálogo”, adujo Capriles, al subrayar que los “diablos” del gobierno manipulan la “buena fe” del Vaticano.
Reiteró que sigue en pie la jornada de protesta programada para el miércoles 26, llamada la “Toma de Venezuela”.
Mitzy de Ledezma, esposa del alcalde de Caracas, acusó en Twitter: “lamentable ver morir el revocatorio y que siga la represión del gobierno impunemente”, en referencia a la decisión del Consejo Nacional Electoral de cancelar el referendo que la oposición exige realizar este año para revocar el mandato de Maduro.
Maduro se reúne con Francisco. En este contexto, el presidente Nicolás Maduro se reunió ayer en Roma con el papa Francisco, en una escala en su viaje de regreso a Venezuela tras una gira por países petroleros de Medio Oriente.
El encuentro privado se realizó en el marco de la “preocupante” situación que atraviesa Venezuela y “golpea con fuerza a toda la población”, indicó un comunicado emitido por El Vaticano.
Agregó que el Papa instó a Maduro a que “con valor tome el sendero de un diálogo sincero y constructivo para aliviar el sufrimiento de las personas, en primer lugar de los pobres, y promover un clima de renovada cohesión social, que permita mirar con esperanza el futuro”.
Con información de Reuters
