Colombia recibió en las últimas 48 horas un contundente apoyo de los gobernantes de América Latina por la firma hoy en la tarde en esta ciudad—balneario del litoral Caribe de un histórico acuerdo de paz que pondrá fin a una guerra civil que lleva más de 52 años.
La suscripción del pacto de paz, negociado de noviembre de 2012 a agosto de 2016 en Cuba entre el gobierno colombiano y las guerrilleras Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), es “la mejor noticia en las últimas décadas de la patria grande”, dijo hoy el presidente de Ecuador, Rafael Correa, al arribar a esta ciudad.
“Felicitaciones mi querida Colombia, y a redoblar el compromiso, todos juntos, toda la región, toda la América Latina para construir aquella paz que no solo signifique la ausencia de guerra sino la presencia de justicia, igualdad de oportunidades, equidad, derechos, buen vivir. Insisto esta es la mejor noticia para la patria grande en las últimas décadas, que por fin Colombia alcance ese bien supremo llamado paz”, afirmó.
Por su parte, el presidente de Panamá, Juan Carlos Varela, declaró al llegar a Cartagena que la suscripción de la paz es “una oportunidad para cerrar” capítulos de dolor, violencia y de “muchas víctimas inocentes”.
El acuerdo de paz permite “abrir una nueva etapa en la vida” de Colombia, por lo que Panamá honra “la memoria de los hombres y mujeres” de los estamentos de seguridad de Colombia “que dieron su vida durante este conflicto, sobre todo a las víctimas inocentes del conflicto”, agregó.
El secretario general de la Organización de Estados Americanos, Luis Almagro, declaró al arribar a Cartagena que rubricar la paz “es definitivamente un evento importante para el hemisferio y para el mundo, tan importante como lo es para Colombia. Este paso de terminar el conflicto armado hace a la sustancia de este derecho que nos debemos dar todos, que es el derecho a la paz”.
El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos Calderón, y el comandante en jefe de las FARC, Rodrigo Londoño Echeverri—cuyos seudónimos de guerra fueron Timoleón Jiménez y Timochenko—rubricarán un acuerdo de paz de impacto nacional e internacional.
El gobierno de Colombia confirmó que al acto central de la firma de la paz, programado para que inicie a las 17:00 horas (mismo tiempo de la Ciudad de México) en una plazoleta de Cartagena, asistirán 15 presidente y gran número de invitados especiales.
Aunque su presencia estaba en duda, el gobierno colombiano anunció que el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, llega esta tarde a Cartagena luego de que surgieron versiones contradictorias acerca de que sorpresivamente habría cancelado su visita. Venezuela y Chile desempeñaron un papel de países acompañantes de las negociaciones en Cuba entre las FARC y el gobierno
Los otros presidentes visitantes son Enrique Peña Nieto, de México, Mauricio Macri, de Argentina, Evo Morales, de Bolivia, Raúl Castro, de Cuba, Luis Guillermo Solís, de Costa Rica, Michelle Bachelet, de Chile, Rafael Correa, de Ecuador, Salvador Sánchez Cerén, de El Salvador, Jimmy Morales, de Guatemala, Juan Orlando Hernández, de Honduras, Juan Carlos Varela, de Panamá, Horacio Cartes, de Paraguay, Pedro Pablo Kuczynski, de Perú, y Danilo Medina, de República Dominicana.
Kuczynski dijo al llegar ayer que “nadie se puede oponer a la paz”.
Aunque el documento que se firme hoy será sometido el domingo próximo a plebiscito, para que el pueblo colombiano decida en las urnas si lo acepta o lo rechaza, el presidente costarricense abogó para que logre la ratificación popular. Todo pacto de paz, dijo Solís, tiene “luces” y “dificultades”, porque “los acuerdos nunca son perfectos y son perfectibles en la práctica”.
“Es hermoso vivir en paz”, puntualizó. “Es probablemente la forma más humana de vivir: eliminar la violencia y la guerra que van de la mano con una paz basada en la justicia”, recalcó.
“Colombia genera esperanza al mundo”, aseguró ayer el presidente de El Salvador, Salvador Sánchez Cerén. Tras recordar que El Salvador sufrió una guerra civil de 1980 a 1992 y que en 2017 cumplirá 25 años de haber suscrito la paz, explicó que en su país “ha sido una paz estable, ha sido una paz duradera. Y no podemos construir el desarrollo sin paz, como también no puede existir desarrollo sin paz”.
En Colombia “por ello se abre una nueva historia para Latinoamérica”, sentenció.
Entre tanto, el gobierno colombiano anunció hoy que más de 250 víctimas del conflicto armado llegaron en la mañana y en las primeras horas de esta tarde a Cartagena,
procedentes de Bogotá, Medellín y Cali pero originarios de los departamentos “altamente afectados” por la guerra, como Caquetá, Putumayo, Huila, Antioquia, Nariño y Valle del Cauca.
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