Washington.— La muerte de un hombre afroestadounidense desarmado por parte de policías blancos en Estados Unidos desató ayer una nueva polémica, después de que se dieran a conocer dos videos del incidente.
La Unión Estadounidense por las Libertades Civiles (ACLU, por sus siglas en inglés) dijo que se trató de un “asesinato a sangre fría”.
La víctima, identificada como Terence Crutcher, de 40 años de edad, murió el viernes durante un incidente con la policía de Tusla, Oklahoma.
Los agentes habían acudido a una carretera tras recibir una denuncia sobre un auto abandonado que estaba impidiendo el paso.
En los videos se ve a Crutcher caminando hacia su vehículo con los brazos en alto y de espalda a los agentes. Uno de los policías lo paraliza con una pistola eléctrica y otro le dispara. En las imágenes se ve que ninguno intenta asistir al hombre.
El jefe de policía de Tulsa, Chuck Jordán, calificó el video como “muy preocupante” y “muy difícil de ver”. Las imágenes fueron captadas por las cámaras de una de las patrullas de la policía y desde uno de los helicópteros de la corporación.
El video muestra a la agente Betty Shelby disparar un balazo a corta distancia que le dio a Crutcher en la parte superior del pecho derecho. Otro agente, Tyler Turnbough, desplegó su pistola eléctrica “Taser” casi al mismo tiempo que Shelby.
Antes de bajar de su patrulla, la agente pidió refuerzos por radio. Al llegar otro agente al lugar, ambos policías caminaron hacia el vehículo y al acercarse Crutcher se les aproximó desde un lado de la calle.
Los agentes pidieron a Crutcher varias veces poner sus manos en alto, lo que hizo pero sin dejar de caminar hacia su vehículo.
Cuando Crutcher se acercó a su automóvil, el agente Turnbough utilizó su pistola eléctrica para tratar de ponerlo bajo control, pero casi al mismo tiempo Shelby disparó.
Autoridades locales y federales investigan el incidente para determinar si presentan cargos criminales contra la agente.
El Departamento de Justicia de Estados Unidos también abrió una investigación para determinar si se produjo una violación de los derechos civiles durante el tiroteo.
Jordán dijo que los agentes no encontraron ningún arma en Crutcher o en su camioneta.
“Quiero asegurar a nuestra comunidad y quiero asegurar a todos ustedes y a la gente de todo el país que van a estar mirando esto, vamos a hacer justicia, punto”, dijo Jordán.
La policía mostró los videos a la familia de Crutcher, a sus abogados, líderes de la comunidad y al procurador del condado de Tulsa, antes de darlos a conocer públicamente.
“Los agentes de Tulsa dejaron muy en claro lo poco que les importan las comunidades de color de Tulsa”, expresó el director legal de ACLU en Oklahoma, Brady Henderson.
“Al disparar a un hombre negro indefenso y luego eludir su obligación moral y legal de prestarle ayuda, [a los policías] claramente poco les importa si los ciudadanos negros que juraron proteger viven o mueren”, añadió.
La policía involucrada, a la que se le impuso licencia administrativa, explicó que el hombre ignoró sus indicaciones en varias ocasiones. Su abogado aseguró que los videos no muestran todo lo ocurrido, ya que la confrontación con Crutcher había comenzado antes de que se comenzara a grabar.
Casos como este han generado protestas en el país.