Naciones Unidas.— En la Reunión de Alto Nivel para atender grandes movimientos de migrantes y refugiados de la ONU, líderes de todo el mundo aprobaron un documento diluido, en el cual se trataron de fijar normas comunes para los refugiados, alienta su reubicación y exhorta a combatir la xenofobia.
La Declaración de Nueva York sobre Refugiados y Migrantes establece además que la comunidad internacional debe compartir la responsabilidad por los desplazados, aunque fijó para 2018 la fecha en que se concrete un pacto global con compromisos sobre el tema.
El documento, firmado por más de un centenar de países, refrendó que los refugiados y los migrantes gozan de derechos sin importar su condición legal, además de que establece como prioridad que los niños reciban educación al llegar al país de destino, entre otros aspectos.
El texto, que no es de cumplimiento obligatorio, no cayó bien entre muchas naciones, porque se hizo a un lado una propuesta inicial que pedía que los países accedieran a reubicar a 10% de los refugiados del mundo.
Defensores de los derechos de migrantes dicen que el documento se queda corto, mientras que el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon lo considera un “hito en nuestros esfuerzos colectivos por resolver los desafíos asociados con la movilidad humana”. Dijo estar al tanto de las críticas y agregó que esperaba que pronto se adopte “un compromiso mucho más fuerte”.
La primera ministra del Reino Unido, Theresa May, se pronunció en favor de reducir el número de inmigrantes que llegan a cada país europeo, y advirtió: “Necesitamos tener claro que todas las naciones tienen el derecho de controlar sus fronteras y proteger a sus ciudadanos”.
“La actual tendencia de movimiento beneficia a bandas criminales, pone en riesgo a la gente y reduce las perspectivas para que los refugiados regresen a casa”, señaló.
México propone siete puntos. El presidente Enrique Peña Nieto hizo un llamado para desterrar los discursos de odio contra los migrantes
El mandatario propuso en la ONU siete puntos para concretar un acuerdo para una migración ordenada, segura y regular. Destacó que “México seguirá trabajando para que se reconozca a los migrantes como agentes de cambio y desarrollo”, ya que sus aportaciones a la sociedad son innegables, “porque a cada migrante lo acompaña su esperanza y su identidad, su energía y su talento”.