Al menos tres personas fallecieron anoche en zonas donde se aplica la tregua en Siria, las primeras víctimas mortales que se constatan desde el inicio del alto el fuego el lunes pasado, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
Una de las víctimas es una menor del pueblo de Hader, en el norte de la provincia meridional de Al Quneitra, que perdió la vida por el impacto de cohetes lanzados por facciones rebeldes contra esa zona.
Otro menor de edad pereció anoche por las heridas sufridas horas antes por disparos de un francotirador en el barrio de Al Mashariqa, bajo el control del régimen y en la ciudad norteña de Alepo.
En esa misma localidad, otra persona murió en un ataque similar, pero de un francotirador de las autoridades, en el distrito de Al Zabdie, en manos de los grupos opositores.
El cese de las hostilidades ha reducido notablemente los niveles de violencia en el país, aunque el Observatorio detectó ayer un aumento importante de las violaciones de la tregua.
El alto el fuego comenzó el pasado 12 de septiembre y se prolongará hasta el domingo.
Según el acuerdo logrado entre Estados Unidos y Rusia, los grupos yihadistas Frente de la Conquista del Levante (antiguo Frente al Nusra) y Estado Islámico (EI) están excluidos de la tregua.
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