Cualquier persona, sin importar edad o estado de salud, puede desarrollar neumonía. Y es posible que la agotadora agenda del recorrido de campaña, con su intenso contacto personal debido a saludos de manos y fotografías con la candidata, haya aumentado el riesgo de que Hillary Clinton contrajera la infección.
La enfermedad de Clinton parece leve, pero está alimentando el debate sobre qué más deben saber los votantes respecto a si ella y Donald Trump están aptos físicamente para ser presidentes. No obstante, la realidad es que no existe una bola de cristal para predecir cosas como una infección común.
Hasta ahora, Clinton ha revelado más información médica que Trump, pero ambos prometieron publicar detalles adicionales. Hasta entonces, dicen algunos médicos, observar a los candidatos en acción puede revelar una evaluación crucial: la función cognitiva.
"En un mundo ideal, ambos candidatos serían más transparentes de manera que no hubiera cuestionamientos sobre estos problemas que cualquiera de nosotros podría enfrentar", dijo el doctor Mark Gladwin, del centro Médico de la Universidad de Pittsburgh. "Gente normal saludable desarrolla estas neumonías".
Pero, "el factor más importante que queremos conocer es la función cognitiva, y nosotros podemos evaluar eso" observando, por ejemplo, qué tan ágiles son los candidatos durante los debates, agregó.
Presentar al menos parte de información sobre su estado de salud es un ritual en año electoral, pero no existe nada que norme qué tanto necesita saber el público; además, los candidatos también tienen privacidad médica. Por otro lado existe la pregunta de si la información respecto a la salud de los candidatos realmente afecta la manera en que vota la gente.
Clinton, de 68 años, y Trump, de 70, presentaron el año pasado una carta firmada por sus respectivos médicos en las que atestiguaron que tienen salud excelente. La médica internista de Clinton escribió casi dos páginas e incluyó resultados de exámenes estándares de laboratorio que mostraron buena salud cardiaca y una explicación bastante detallada sobre problemas previos: una conmoción cerebral después de una caída en 2012, y problemas de trombosis en piernas por los que toma anticoagulantes como precaución.
La carta del médico de Trump constó de cuatro párrafos con pocos detalles más allá de que tiene buena presión arterial. Su médico, un gastroenterólogo, dijo que Trump "no tiene problemas médicos significativos" y "sería el presidente más saludable que haya sido elegido".
No obstante, la información proporcionada por ambos candidatos está muy lejos de igualar la proporcionada por el senador republicano John McCain en 2008, cuando a los 71 años de edad permitió que reporteros revisaran brevemente más de 1.000 páginas de registros médicos para mostrar que estaba libre de cáncer y buen estado físico para prestar servicio como presidente de la nación.