Senadores brasileños dieron un paso más hacia la impugnación de la presidenta suspendida Dilma Rousseff.
Una comisión votó por 14 a cinco remitir el caso al pleno del Senado para someterlo a votación de sus 81 integrantes la semana próxima.
Bastará una mayoría simple del Senado para decidir si se juzga a Rousseff por violación de delitos fiscales. Luego corresponderá al presidente de la Corte Suprema fijar la fecha del juicio.
Se requerirá una mayoría de dos tercios —54 senadores— para aprobar la destitución de la presidenta. En tal caso, el presidente interino Michel Temer seguirá ejerciendo el cargo hasta el fin del período, en 2018.
Pero si no se logra la mayoría de dos tercios a favor de la destitución, Rousseff regresará al cargo.
jlcg