El nuevo presidente de Brasil, Michel Temer, quien asumió hoy el cargo por la destitución de Dilma Rousseff, reunió a sus ministros y exigió que desmonten la tesis del "golpe" defendida por la ahora ex mandataria.
"A quienes les digan golpistas, respondan golpistas son ustedes, que están en contra de la Constitución", porque el proceso contra Rousseff fue hecho "dentro del más estricto marco constitucional", declaró en su primer encuentro con su gabinete tras jurar el cargo ante el Congreso.
Esta mañana, después de un proceso que duró ocho meses, 61 de los 81 senadores brasileños votaron para separar a Dilma Rousseff de su cargo de presidente.
Rousseff, suspendida de su cargo en mayo, fue acusada de irregularidades al administrar el presupuesto federal.
Si todo sale como se planea, Michel Temer dirigirá Brasil hasta el 1o de enero de 2019.
Temer no goza de alta popularidad entre los ciudadanos y hay quienes lo acusan de querer desmantelar los programas sociales impulsados por el Partido de los Trabajadores, el de Dilma Rousseff.
Legisladores afines a la mandataria destituida adelantaron que formarán una "oposición fuerte" al nuevo gobierno.
jlcg