Washington.— El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, proclamó ayer el “final de la democracia” en Venezuela, a cuyo gobierno calificó de “régimen” y a la situación que impera en el país de “tiranía”.
A través de Twitter, Almagro publicó una carta dirigida al opositor Leopoldo López, cuya condena de 14 años de cárcel fue ratificada recientemente, hecho por el cual afirmó que en Venezuela “hoy no rige ninguna libertad fundamental ni ningún derecho civil o político, y que estos han expresamente quedado sin efecto en la conducción de los asuntos de gobierno.
“Se ha traspasado un umbral, que significa que es el fin mismo de la democracia. La comunidad internacional es clara al pedir ‘no más tiranía en el cielo’. Un cielo que ya no existe”, señaló el secretario general de la OEA.
Continúa represión. El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, fijó un plazo de 48 horas para que sus ministros despidan a algunos trabajadores de la administración pública que firmaron para solicitar un referéndum revocatorio que interrumpa su mandato, informó el lunes un vocero del partido oficial.
Cientos de empleados públicos, incluidos policías y bomberos, ya habían denunciado que fueron despedidos por firmar a favor del revocatorio contra Maduro.
El dirigente del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) y alcalde de un municipio capitalino, Jorge Rodríguez, puntualizó que la medida se aplicará a los cargos considerados “de confianza” o directivos.
“Hoy por orden del presidente del partido, Nicolás Maduro, se ha citado a cinco ministros (...) para establecer de forma categórica que no puede haber en cargos directivos, en ministerios, en instituciones públicas, en gobernaciones y alcaldías, personas que estén en contra de la Revolución y del presidente”, dijo Rodríguez.
El alcalde agregó que le fueron entregados a los ministros de los despachos de Alimentación, Industrias Básicas y Finanzas, entre otros, los nombres de los funcionarios que “participaron en el proceso de autorización al partido de la derecha para la activación del fenecido revocatorio.
“Tienen un plazo de 48 horas para que estas personas que tienen cargos de confianza, cargos directivos, pues tengan otro destino laboral”, señaló. Los despidos no justificados violan un decreto-ley de inamovilidad laboral, firmado por el propio Maduro en el 2015. No obstante, el presidente tiene la libertad de remover de su cargo a los directivos.
La oposición está ejerciendo presión para convocar este año un plebiscito en contra de Maduro, a quien responsabiliza por la recesión económica que aqueja al país, marcada por la escasez de alimentos y medicinas y una alta inflación.
La recolección de las firmas necesarias para la convocatoria al referéndum “probablemente” se iniciaría a finales de octubre, dijo a principios de mes el Consejo Nacional Electoral (CNE).