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El promotor de justicia del Vaticano (fiscal), Gian Piero Milano, pidió hoy más de tres años de cárcel para los principales imputados por el robo y filtración de documentos confidenciales conocido como Vatileaks 2.
El caso, que se refiere a la difusión de textos reservados relativos a la reforma financiera a las estructuras vaticanas ordenada por el Papa Francisco, se encuentra en la fase de las últimas audiencias el proceso.
En la sala de los tribunales civiles del Estado Vaticano, el fiscal presentó solicitó tres años nueve meses de reclusión para Francesca Immacolata Chaouqui, especialista en relaciones públicas, al considerada “inspiradora” y “verdadero motor” de la filtración.
Además solicitó tres años y un mes de prisión para el sacerdote español Lucio Ángel Vallejo Balda, “principal personaje” y responsable directo de la filtración, usados para los libros “Vía Crucis”, de Gianluigi Nuzzi, y “Avaricia”, de Emiliano Fittipaldi.
Vallejo Balda y Chaouqui formaban parte de la COSEA, la comisión independiente fundada en 2013 por el Papa para estudiar todos los organismos administrativos vaticanos y proponer los cambios a realizar en una reforma.
Milano argumentó que ambos formaron “una alianza para adquirir poder” por fuera de la comisión y a espaldas de las autoridades eclesiásticas, y al no obtener los puestos que deseaban dentro del Vaticano, decidieron filtrar la información a los periodistas.
Para un tercer imputado, el secretario de Vallejo, Nicola Maio, el fiscal pidió un año y nueve meses de cárcel por desempeñar labores de apoyo ejecutivo.
Los otros acusados son los periodistas Nuzzi y Fittipaldi. Para el primero de ellos fue pedida una pena de un año de cárcel, mientras que para el segundo se invocó la absolución por “falta de pruebas”.
A decir del fiscal, Nuzzi tuvo “complicidad moral” con Vallejo y Chaouqui, ya que mantuvo una actitud activa en la filtración de documentos con reuniones secretas y peticiones explícitas, mientras el otro periodista sólo se limitó a recibir la información.
Mañana martes está prevista una nueva audiencia del juicio, la decimonovena, durante la cual los abogados defensores de los imputados podrán exponer sus alegatos finales antes de que, el próximo miércoles 6, los jueces alcancen una decisión final.
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