Un primo de uno de los dos yihadistas que el martes pasado asesinaron a un cura cuando oficiaba una misa en su parroquia de Normandía fue presentado ante un juez antiterrorista con vistas a su inculpación y su probable ingreso en prisión.
La Fiscalía de París anunció en un comunicado que ha abierto una investigación contra Farid K., de 30 años, primo del terrorista Abdel Malik Petitjean por cuatro cargos y que va a solicitar que una vez imputado se le ponga en prisión provisional.
La Fiscalía le acusa de los cargos de pertenencia a una organización terrorista, asesinato terrorista en banda organizada de una víctima en razón de religión, tentativa de asesinato terrorista de una víctima igualmente por su religión y secuestro terrorista de varias personas en banda organizada.
El Ministerio público hizo hincapié en que las investigaciones realizadas han puesto en evidencia que Farid K. (que se presentó en una comisaría al saber que su primo era uno de los autores del atentado) sabía "perfectamente" que Petitjean preparaba con carácter inminente una "acción violenta", aunque pudiera no estar al tanto del lugar y del día preciso.
Este hombre, natural de Nancy (noreste de Francia) había sido condenado en una ocasión en 2009 por una infracción vial que le valió una multa de 800 euros.
Por otro lado, otro hombre de 22 años que también fue interrogado bajo arresto para aclarar su posible complicidad con los dos terroristas ha quedado en libertad sin cargos.
Se trata de un refugiado sirio, que había sido detenido el jueves en un centro de acogida de Cusset, en el departamento de Allier, porque en la casa de Kermiche se encontró una fotocopia de su pasaporte.
Petitjean y su cómplice Adel Kermiche, ambos de 19 años, irrumpieron el pasado martes por la mañana en la parroquia de Saint Étienne du Rouvray, a las afueras de la ciudad de Ruán, degollaron al párroco Jacques Hames, que oficiaba una misa, y dejaron malherido a un feligrés también octogenario.
Los dos jóvenes, que mantuvieron retenidas a las personas que asistían al oficio religioso, fueron abatidos por la policía al salir de la iglesia. Su acción fue reivindicada por el Estado Islámico.
jlcg