Dacca.— Una toma de rehenes en un restaurante de Dacca, capital de Bangladesh, terminó ayer con 28 muertos, entre ellos 20 rehenes —la mayoría extranjeros—, dos policías y seis atacantes, en una acción que reivindicó el Estado Islámico (EI). El gobierno advirtió que “no tolerará” actos terroristas.

El restaurante, ubicado en la zona diplomática, fue atacado la noche del viernes y tras 12 horas de permanecer sitiado por las fuerzas de seguridad éstas finalmente lo asaltaron ayer por la mañana y mataron a seis de los siete secuestradores, mientras que otro fue capturado. La decisión se tomó después de que los supuestos secuestradores difundieran fotos de una veintena de cautivos a los que dijo haber asesinado. Poco después, el EI difundió fotos de cinco hombres que, afirmó, perpetraron el ataque, los identificó por sus nombres de guerra y afirmó que eran de Bangladesh.

Nueve italianos, siete japoneses, un estadounidense, un estudiante de India que al parecer también tenía la nacionalidad de EU y dos bangladesíes conforman la lista de 20 víctimas, a las que se suman dos policías muertos durante el enfrentamiento del viernes. El presidente de Italia, Sergio Mattarella, quien estaba de visita en México como parte de una gira por Latinoamérica, decidió ayer regresar a Roma para “rendir homenaje a las víctimas italianas”.

El gobierno de Bangladesh declaró dos días de luto tras el ataque, uno de los más violentos en la historia de esta nación asiática de mayoría musulmana que desde hace 18 meses vive una escalada de agresiones de militantes, principalmente contra quienes defienden un estilo de vida secular o liberal. Hace dos semanas la policía detuvo a más de 12 mil personas en una polémica acción contra el extremismo.

De acuerdo con el diario estadounidense The New York Times, este ataque, junto con el tiroteo en Orlando, Florida, revelan que conforme el EI pierde territorio en Irak y Siria, está optando por realizar e inspirar misiones terroristas en otras partes del mundo, convirtiéndose en una versión cada vez más sofisticada de Al-Qaeda, que también se atribuyó lo ocurrido en Dacca.

Tras ingresar al restaurante con panadería Holey Artisan Bakery, los atacantes armados ordenaron ponerse de pie a todos los bangladesíes, exigieron a los presentes recitar el Corán y comenzaron a matar a quienes no se lo sabían. Según relatos de testigos, los secuestradores detonaron además varios explosivos y dispararon.

La mayoría de víctimas fueron asesinadas con machetes o cuchillos. Otros 13 rehenes fueron llevados heridos al hospital, dijo la primera ministra del país, Sheikh, Hasina, quien calificó la toma de rehenes de ataque terrorista, algo que, dijo, “no vamos a tolerar”.

Diego Rivera, chef argentino que trabajaba en el restaurante y sobrevivió al saltar desde un tejado al que accedió por la cocina del lugar, contó que los agresores tenían entre 20 y 25 años, gritaban “Alá es grande” y llevaban “bolsas con explosivos, bombas y granadas”, además de cuchillos. La Casa Blanca condenó “el espantoso ataque terrorista en Dacca”, al igual que la Cancillería mexicana, que externó sus “condolencias y solidaridad” a los países afectados y reiteró “su rechazo al terrorismo en todas sus formas”.

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses