Más Información
Francia va a movilizar a 23 mil 500 policías, gendarmes, militares y reservistas para proteger los eventos estivales programados en todo el país ante la amenaza terrorista, que se encuentra en el nivel más elevado que se ha registrado hasta ahora.
El ministro de Interior, Bernard Cazeneuve, indicó que se va a reforzar el dispositivo de seguridad para los 56 grandes eventos que deben celebrarse hasta finales de verano, en una comparecencia ante la prensa al término de un consejo restringido de seguridad y defensa presidido por el jefe del Estado, François Hollande.
Se trata de garantizar "el buen desarrollo de esos acontecimientos", destacó Cazeneuve, tras esta nueva reunión de crisis, en esta ocasión después del atentado yihadista de ayer en una iglesia de Normandía, donde fue asesinado el sacerdote que oficiaba la misa y herido un feligrés antes de que los dos terroristas fueran abatidos por la policía.
El ministro dijo haber dado instrucciones a los prefectos (delegados del gobierno) para evaluar en cada caso las necesidades con los alcaldes, delimitar las responsabilidades y decidir la cancelación de los actos "si no se dan las condiciones" de seguridad.
El refuerzo del dispositivo se concretará con el aumento a 10 mil del número de militares que participan en la misión antiterrorista Sentinelle por todo el territorio francés, pero también con una modificación de su despliegue.
Así habrá más militares fuera de París, que ahora concentra el 40 % del total, y se aumentará el recurso a los reservistas de la Gendarmería.
Cazeneuve indicó que 2 mil 500 jóvenes franceses han manifestado su interés por integrarse en la reserva operativa.
Fuera de las fronteras francesas, el ministro de Defensa, Jean-Yves Le Drian, confirmó el envío a finales de septiembre del portaaviones "Charles de Gaulle" para incrementar las capacidades militares contra el Estado Islámico (EI) en Siria e Irak.
En esa misma línea, aumentará el despliegue de cazas franceses en bases de Jordania y de los Emiratos Árabes Unidos para bombardear las posiciones del EI en Siria e Irak.
Cazeneuve volvió a repetir la posición que ayer defendió Hollande frente a las críticas de la oposición de derechas sobre la insuficiencia de la política antiterrorista del Gobierno.
Consideró que "en gran medida" se ha hecho "lo que debía hacerse" aunque siempre se puede añadir algún elemento, y por eso se mostró abierto al diálogo, pero insistió en las líneas rojas.
"No podemos salir del Estado de derecho para proteger el Estado de derecho" porque por esa vía "habremos consagrado la victoria de los terroristas", argumentó.
A su juicio, tomar medidas que se salten las reglas del marco jurídico constitucional "sería una forma de consagración de la demagogia" y generaría "divisiones considerables".
jlcg