Pasta de dientes, desodorante, harina para hacer las arepas y medicinas son solo algunos de los productos que miles de venezolanos envían desde Miami a familiares en Venezuela ante la grave crisis de desabasto que sufre el país sudamericano.
“En Venezuela hay una gran escasez y si se consiguen (los productos) no es en el precio que dice el gobierno y tienes que pagar a los revendedores que te los dan al triple”, señaló a Notimex Patricia Sandoval, una inmigrante venezolana que lleva más de una década en Miami.
Sandoval envió a través de una compañía de carga una caja con latas de atún, arroz, frijoles, café, jabón y papel de baño para su hermano que vive en la provincia de Maturín, donde dice que es más difícil conseguir las cosas que en la capital Caracas, donde tiene otra hermana.
“Mi hermano nos llamó y nos dijo que ya el dinero no le alcanza y se hace casi imposible conseguir estos productos”, apuntó Sandoval, que pago 300 dólares por los productos y 56 por el envío a través de la empresa Investment Logistic Solutions.
Al igual que Sandoval, miles de venezolanos, que antes enviaban electrónicos, ahora están enviando alimentos y otros básicos a través de unas 200 compañías de envíos en el sur de Florida, señaló el activista José Colina, líder del grupo Venezolanos Perseguidos Políticos en el Exilio (Veppex).
“Acá en Estados Unidos, específicamente en el sur de Florida, existen unos 300 mil venezolanos, que en las últimas semanas, dada la crisis económica que está viviendo el país, se han visto en la imperiosa necesidad de enviar comida para Venezuela”, afirmó Colina.
“Esto que está ocurriendo a gran escala demuestra que en Venezuela lo que existe es una crisis humanitaria, en la que desafortunadamente sufren más los que no tienen familiares fuera del país, pues no pueden recibir los insumos que nosotros enviamos”, explicó.
“Esto ha hecho también que acá en Estados Unidos haya una proliferación de compañías de envíos que se dedican a llevar comida e insumos médicos a los venezolanos que no tienen absolutamente nada dentro del país”, apuntó.
“Las medicinas son lo más escaso”, afirmó por su parte Marisol Diéguez, presidente de la organización no gubernamental (ONG) Programa de Ayuda Humanitaria para Venezuela, al señalar que a diario están muriendo principalmente ancianos y niños en diversas partes del país por falta de medicinas.
Diéguez explicó que debido al control de cambio del gobierno es imposible adquirir divisas y esta es una de las razones fundamentales de la escasez en este rubro.
“Hay aproximadamente un 90 por ciento de escasez en los inventarios farmacéuticos. Lo que pasó fue que sencillamente los laboratorios y distribuidores médicos no recibieron sus pagos a tiempo y tuvieron que cerrar”, apuntó.
El Programa de Ayuda Humanitaria tiene una bodega en Miami en donde colecta medicinas que son enviadas de varias partes del mundo y que después son remitidas a Venezuela, un apoyo que, aunque mínimo, “ayuda a salvar algunas vidas”, refirió.
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