La Fiscalía considera que el ataque ayer de un joven afgano de 17 años contra un tren regional en Baviera (sur de Alemania) tiene un trasfondo político, posiblemente relacionado con la muerte de un amigo suyo en Afganistán el pasado fin de semana.
El ataque fue dirigido con "clara intencionalidad de matar", indicó el fiscal del distrito de Bamberg, Erick Ohlenschlager, quien afirmó que el agresor pretendía "vengarse sobre los infieles" por esa muerte.
El joven llevaba unos años en Alemania, donde llegó como refugiado no acompañado, y tras pasar una temporada en un centro de Baviera había sido transferido recientemente a una familia de acogida.
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