Un inmigrante afgano adolescente, armado con un hacha y un cuchillo, atacó el lunes a pasajeros a bordo de un tren regional en el sur de Alemania, y causó heridas a cuatro antes de que agentes lo mataran a tiros cuando huía, dijeron las autoridades.
La policía de Wuerzburg dijo en su página de Facebook que tres de las víctimas sufrieron heridas graves y una tenía heridas leves. Otras 14 personas fueron atendidas por shock.
El principal funcionario de seguridad de Baviera, el ministro estatal del Interior, Joachim Herrman, dijo a la televisora ARD de Alemania, que el agresor fue identificado como un afgano de 17 años.
Alemania registró el año pasado a más de un millón de migrantes que ingresaron en el país, entre ellas 150 mil afganos, pero se desconocía de momento si el agresor estuvo entre ellos o si se trataba de alguien que se encontraba desde mucho antes en el país.
Herrmann señaló que de acuerdo con la información, el adolescente llegó a Alemania como un menor no acompañado y había vivido algún tiempo en la zona de Wuerzburg, inicialmente en una instalación para refugiados en la localidad de Ochsenfurt y más recientemente con una familia adoptiva.
Dijo que la policía continuaba investigando las causas del ataque y examinaba las versiones de que el adolescente "había exclamado algo" durante el incidente.
Herrmann declaró lo anterior en relación con versiones de que algunos testigos habían escuchado al sospechoso gritar "Allahu Akbar" ("Dios es grande") durante el ataque.
El tren viajaba de la ciudad bávara de Treuchtlingen a Wuerzburg, que se ubica a unos 100 kilómetros (60 millas) al noroeste de Nuremberg.
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