Barack Obama lamentó hoy la muerte de tres policías durante un tiroteo en Baton Rouge, Louisiana, en el que otros tres agentes resultaron heridos.
“Como nación debemos ser claros y fuertes al decir que nada justifica la violencia contra las fuerzas del orden. Los ataques a policías son un ataque contra todos nosotros y contra el cumplimiento de la ley, que hace posible la convivencia como sociedad”, declaró Obama.
Durante un mensaje a los medios desde la Casa Blanca, el mandatario informó que conversó con el gobernador de Louisiana, John Bel Edwards, y el alcalde de Baton Roug, Kip Holden, para ofrecerles todo el apoyo del gobierno federal y reiteró su apoyo para las fuerzas de Baton Rouge y de todo el país
También habló con la fiscal general, Loretta Lynch, y señaló que el FBI participa en la investigación. “Con el trabajo de todos los niveles de gobierno, se hará justicia”, aseguró el mandatario.
Obama lamentó profundamente el ataque y aseguró que “nuestros corazones están con las familias de las víctimas y con los oficiales heridos que aún luchan por sus vidas. Esto está pasando demasiado seguido y he pasado mucho tiempo con fuerzas del orden esta última semana”.
Hace cinco días viajé a Dallas al funeral de los policías que fueron asesinados ahí, “y dije entonces que aquel asesino no sería el último que trataría de separarnos y es lo mismo con este último. Depende de todos nosotros asegurarnos de que falle, de que nuestra mejor cara sea reflejada en todo el país”.
“Tenemos divisiones y no son nuevas, a veces los medios y las redes las amplifican. Con las convenciones políticas cerca, la retórica política suele ser más intensa que lo usual. Ahora es más importante que nunca que todos nos enfoquemos en las acciones que pueden unificar a este país, en lugar de dividirlo”, apuntó Obama.
“No necesitamos una retórica incendiaria, ni ataques sin sentido arrojados sin pensar sólo para cumplir una agenda. Necesitamos templar nuestras palabras y abrir nuestros corazones”, señaló el mandatario.
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