El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, reclamó al Consejo de Seguridad la imposición inmediata de un embargo de armas a Sudán del Sur y de más sanciones a los líderes del país en respuesta a la nueva oleada de combates.
Ban, en una conferencia de prensa, solicitó también un refuerzo de la misión de Naciones Unidas en Sudán del Sur (UNMISS) para que pueda proteger a la población.
"La vuelta a la lucha es indignante", dijo el diplomático coreano, que acusó a los líderes sursudaneses de fallar nuevamente al país y les exigió poner fin a las hostilidades.
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