La Policía Nacional Bolivariana de Venezuela impidió el jueves con cordones de efectivos y gases lacrimógenos la marcha convocada por estudiantes universitarios hacia la sede del Consejo Nacional Electoral (CNE) para exigir la convocatoria a un referéndum revocatorio del mandato del presidente Nicolás Maduro.
Los estudiantes que acudieron a la movilización intentaron llegar hasta la sede del CNE, en el centro de Caracas, por distintas vías, que fueron bloqueadas por los cuerpos policiales.
Ante esto, los manifestantes decidieron regresar a la Universidad Central de Venezuela (UCV), una de las más importantes del país, mientras un pequeño grupo mantuvo su protesta en la entrada principal de la casa de estudios y luego fue dispersado con gases lacrimógenos.
El presidente de la Federación de Centros Universitarios de la UCV, Hasler Iglesias, atribuyó a los policías los "momentos en los que hubo represión" de la manifestación, que calificó de "pacífica".
Iglesias defendió el "derecho" a manifestarse "en las calles" en protesta por el hambre, la crisis de salud, la inseguridad, y la situación económica que atraviesan las universidades. "Tenemos sobradas razones para exigir el revocatorio, y sobrada legalidad y legitimidad en nuestras acciones", agregó.
Poco antes de iniciarse la movilización, varios diputados, entre ellos, Julio Borges, jefe de la bancada opositora de la Asamblea Nacional (AN, Parlamento), fueron agredidos por presuntos partidarios del chavismo frente a la sede del Poder Electoral cuando protestaba para exigir respuesta sobre el proceso del revocatorio.
El Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela (TSJ) emitió el mes pasado una sentencia que prohíbe las manifestaciones "no autorizadas" en los alrededores de las sedes del Poder Electoral, tras una solicitud de trabajadores de esa institución.
erp