El gobierno colombiano y la guerrilla de las FARC oficializaron el jueves el abandono de las armas por parte de los rebeldes.
El anuncio fue hecho por los delegados de los países garantes, Cuba y Noruega, en presencia del presidente colombiano Juan Manuel Santos, el máximo jefe de las FARC Rodrigo Londoño o "Timochenko" y el secretario general de Naciones Unidas Ban Ki-moon, entre otras personalidades.
Santos ha dicho que la ONU servirá de garante para que las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) entreguen hasta la última de sus pistolas.
Cifras oficiales dan cuenta de que las FARC tienen en sus filas a unos 7 mil combatientes en armas.
Desde fines de 2012, la administración de Santos y las FARC llevan adelante en la capital cubana un proceso de paz para tratar de poner fin a más de medio siglo de conflicto armado interno.