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Un joven palestino de 14 años falleció por disparos de soldados del ejército de Israel y otros cuatro resultaron heridos, dijo un funcionario palestino.
Wagie Ahmad, presidente del consejo local Beit Ur al-Tahta en Cisjordania, dijo que el adolescente, Mahmoud Badran, falleció cuando el auto en el que viajaba fue baleado por una patrulla militar israelí. El hospital en la ciudad cisjordana de Ramala dijo que otra persona sufrió heridas moderadas y tres más presentaron lesiones leves.
El ejército israelí dijo que respondía a palestinos que arrojaban piedras y cócteles incendiarios a autos en una concurrida carretera de la zona y que tres personas resultaron heridas en ese incidente. Los soldados intentaron proteger a otros vehículos y dispararon a los sospechosos, agregó.
"Por la investigación inicial parece que transeúntes no involucrados fueron alcanzados por error durante la persecución", explicó el ejército en un comunicado.
En los últimos nueve meses, palestinos perpetraron decenas de ataques, incluyendo apuñalamientos, balaceras y atropellos, que se cobraron la vida de 32 israelíes y dos estadounidenses. Unos 200 palestinos fallecieron durante este periodo, la mayoría de ellos identificados como agresores por Israel. El resto murió en enfrentamientos con fuerzas de seguridad.
En un principio, los ataques eran casi diarios, pero en los últimas semanas son menos frecuentes.
Antes el martes, el ejército de Israel anunció la demolición de la vivienda de un palestino que mató a puñaladas a un turista estadounidense, veterano de guerra, a principios de año.
Los soldados entraron en la localidad cisjordana de Hajjah a primera hora del martes para tirar abajo la casa de Bashar Masalha, quien en marzo mató a Taylor Force e hirió a otras 10 personas en un ataque en el paseo marítimo de Tel Aviv.
Israel emplea estas demoliciones como medida disuasoria contra nuevos ataques. Los palestinos las califican de castigo colectivo.
lsm
