LONDRES.— El respaldo a la permanencia de Reino Unido en la Unión Europea (UE) daba ayer señales de recuperación, luego de que un ejecutivo de la firma encuestadora YouGov afirmó que dos nuevos sondeos apuntaron a un impulso de la campaña a favor de la membresía en el bloque de cara al referéndum del 23 de junio.

“Estamos en la última semana de la campaña por el referéndum y hemos visto un giro a favor de mantener el status quo que se expresa con mayor fuerza”, dijo Anthony Wells, director de YouGov, en una publicación online.

La campaña por la permanencia aventaja, en promedio, un punto porcentual (44% contra 43%) a la de abandonar al bloque europeo, conocida como Brexit, aunque de acuerdo con una encuesta publicada por el diario escocés The Herald, la ventaja sería de tres puntos (46% contra 43%). Otro sondeo, difundido por el diario Observer, situó el apoyo a ambas campañas en 44% cada una, cuando en las semanas anteriores los simpatizantes de abandonar la UE llevaban una ventaja de hasta siete puntos.

El aparente cambio en el electorado británico se produce después del asesinato, el jueves, de la legis-ladora laborista Jo Cox, quien apoyaba la membresía británica en la UE. Ayer, el hombre acusado de asesinarla se presentó en la corte.

Vestido con ropa deportiva gris y flanqueado por dos guardias de seguridad, Mair, de 52 años, fue consultado por su nombre por un secretario judicial en la Corte de Magistrados de Westminster en Londres. “Mi nombre es muerte a los traidores, libertad para Gran Bretaña”, respondió. Cuando se le repitió la pregunta, Mair reiteró sus palabras, en los únicos comentarios realizados en la audiencia de 15 minutos.

“Teniendo en cuenta el nombre que acaba de dar, [Mair] debe ser visto por un siquiatra”, dijo la juez Emma Arbuthnot a la corte.

Mair no hizo más comentarios en la audiencia, que fue su primera aparición pública desde que la policía lo arrestó en la ciudad de Birstall, en Yorkshire, donde apuñaló y baleó a Cox. Horas antes de la audiencia, la policía inculpó a Mair de homicidio y será procesado por asesinato, asalto agravado y posesión de armas.

Su escueto comentario reactivó las versiones de que el ataque estuvo políticamente motivado puesto que sus palabras se hicieron eco del mensaje de los seguidores del llamado Brexit, que argumentan que dejar la UE sería un voto por la libertad. La prensa británica vincula al sospechoso con grupos de extrema derecha y presuntamente habría comprado un manual de un grupo neonazi en Estados Unidos para construir su propia arma de fuego.

El asesinato llevó a los líderes políticos a suspender las campañas con miras al referéndum. La incertidumbre ha causado problemas en los mercados financieros.

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