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natalia.gomez@eluniversal.com.mx
Al guerrerense Miguel Ángel Honorato le gustaba el futbol y tenía planeado ir a la final de la Copa América con su hermano José. Era residente de Apopka, en Florida, Estados Unidos, país al que llegó en 1991, con cuatro años. Casado con Minerva, procreó tres hijos.
José es el hermano de Miguel y se armó de fortaleza para hablar sobre su hermano y la pérdida repentina que tuvieron en su familia. Fue por las noticias que José se enteró de la masacre del domingo pasado en el bar gay Pulse, en el que se celebraba una fiesta latina de la comunidad Lésbico, Gay, Bisexual, Transgénero y Transexual (LGBTT). No se enteró de que Miguel se encontraba en ese lugar sino hasta que su cuñada Minerva le envió mensaje para preguntar si sabía dónde estaba aquél.
José, contactado a través de Facebook, reconoce que Miguel Ángel era un hombre valiente que no se dejaba, pero que tampoco era de los que generaba o buscaba problemas, “no merecía morir”.
El perfil de Facebook del mexicano que falleció el pasado domingo en el bar Pulse en Orlando a manos de quien fue identificado como Omar Seddique Mateen, fue modificado y ahora aparece la leyenda En Memoria de Miguel Honorato.
Ahí se ve al connacional fallecido en una selfie, en la que, como apasionado del futbol soccer que era, portaba una playera de su equipo favorito, el Club América.
La madrugada del domingo, 49 personas murieron y 53 resultaron heridas tras el ataque al bar gay.
El atacante murió durante un enfrentamiento con la policía en el lugar, después de más de tres horas de pesadilla para los presentes, entre los que estaba Miguel, quien de acuerdo con su hermano, fue invitado por dos amistades que salieron ilesas.
