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Al menos 16 miembros del grupo terrorista Estado Islámico (EI) y diez combatientes de la oposición armada siria murieron hoy en choques entre las dos partes en las afueras de la localidad de Marea, al norte de la ciudad septentrional de Alepo.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos aseguró en un comunicado que los choques se desencadenaron después de un nuevo intento del EI por arrebatar la población de Marea a combatientes opositores adversarios.
En esta nueva ofensiva, los miembros del EI consiguieron acceder a algunos barrios periféricos de la ciudad e intercambiaron ataques con armas pesadas con los rebeldes, que incluyen también facciones islámicas.
El comunicado añadió que los yihadistas detonaron varios coches bomba contra las concentraciones de los combatientes adversarios, mientras que las fuerzas opositoras capturaron a varios miembros del EI, entre ellos menores de edad.
Por otra parte, los helicópteros del régimen sirio lanzaron hoy una nueva ofensiva contra la ciudad de Alepo, donde bombardearon con más de veinte barriles de explosivos los barrios de Bustán al Basha, Al Haydariya, Al Yandul.
El ataque causó daños materiales pero se desconoce si causó bajas entre la población.
Asimismo, las fuerzas gubernamentales bombardearon el barrio de Al Halak con proyectiles y artillería, lo que causó un número indeterminado de heridos, añadió el Observatorio.
Ayer, el EI lanzó una ofensiva en el norte de la provincia de Alepo contra zonas bajo el control de las facciones rebeldes islamistas y les arrebató el control de cinco localidades cerca de la frontera con Turquía.
La organización extremista lanzó este ataque mientras es hostigada en el norte de la provincia de Al Raqa (noreste), su bastión principal sirio, por las Fuerzas de Siria Democrática (FSD), una coalición kurdo-árabe apoyada por EEUU.
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