Gran Bretaña no puede esperar favores de sus vecinos si opta por "desertar" de la Unión Europea el próximo mes, dijo el viernes el presidente del brazo ejecutivo del bloque regional, Jean-Claude Juncker.
"Estoy seguro que los desertores no serán recibidos con los brazos abiertos", dijo el presidente de la Comisión Europea en una entrevista al diario francés Le Monde, después de ser consultado sobre cómo sería el día después si el denominado "Brexit" se impusiera en el referendo del 23 de junio.
"Si los británicos dijesen 'No', que espero que no lo hagan, la vida en la Unión Europea no va a seguir como antes", dijo Juncker. "Gran Bretaña tendrá que aceptar ser considerado como un tercero".
"Si los británicos abandonan Europa, la gente tendrá que enfrentar las consecuencias (...) No es una amenaza, pero nuestras relaciones ya no serán lo que son hoy en día", agregó.
El tratado de la UE establece un límite de dos años para negociar las condiciones para que un Estado miembro concrete su salida. Sin un acuerdo unánime, o que los 28 estados pacten extender las negociaciones, el Estado saliente es entonces excluido del bloque.
Muchos defensores de la salida británica del bloque, conocida popularmente como "Brexit", dicen que quieren negociar una acuerdo de libre comercio y otros términos para mantener vínculos con la UE, pero muchos diplomáticos dudan que esto se pueda lograr en dos años.
erp