Moscú/ Washington.— Rusia y Estados Unidos se comprometieron ayer a una solución política conjunta al conflicto en Siria y a ejercer presión sobre el gobierno de Bashar al-Assad y las fuerzas rebeldes para lograr un alto el fuego en ese país.
Una declaración conjunta publicada por el Departamento de Estado en Washington indicó que Moscú, un aliado cercano del presidente Al-Assad, quiere “trabajar con las autoridades sirias” para reducir las operaciones aéreas sobre zonas civiles, después de los ataques aéreos a un hospital y a un campo de refugiados en el norte de Siria en las últimas semanas, que causaron decenas de muertos y un fuerte rechazo internacional.
Por su parte, el Ejército sirio anunció que extendió su tregua en Aleppo y alrededores por 48 horas, de acuerdo con medios estatales.
En tanto, el ministro alemán de Relaciones Exteriores, Frank-Walter Steinmeier, dijo que el compromiso entre Estados Unidos y Rusia era una “señal alentadora” para la oposición en Siria. Sin embargo, el desarrollo de la situación en ese país aún no permite reiniciar las conversaciones de paz en Ginebra, agregó.
En tanto, el ministro de Asuntos Exteriores francés, Jean-Marc Ayrault, dijo que en el encuentro en Viena también estarán presentes Siria e Irán. También para Estados Unidos y Rusia el proceso de las conversaciones de paz en Ginebra, lideradas por las Naciones Unidas, representan el marco de acción.
Ambos países reconocieron que el alto el fuego alcanzado recientemente en algunas provincias llevó a una reducción significativa de la violencia. Sin embargo, en los últimos días hubo que enfrentar grandes dificultades en algunas partes de Siria, también en relación al acceso de la ayuda humanitaria en las zonas asediadas.
Estados Unidos consideró que el alto al fuego está en vigor en Aleppo a pesar de que los enfrentamientos en la periferia han dejado decenas de muertos. “Los combates en el suroeste de la ciudad implican a Al-Nusra y otros grupos, así que no deberían tomarse como señales de que el cese de hostilidades no está en vigor”, subrayó un funcionario de EU.