El ministro venezolano de Defensa, general Vladimir Padrino, denunció ayer que en el país hay “un golpe de Estado en proceso”, en el que se utilizan ataques contra la institución militar.
“Hay un golpe en desarrollo. Basta con ver las reacciones internacionales, las corporaciones mediáticas actuando, las reacciones del Parlamento de la UE, las de los voceros de Estados Unidos y el presidente [Barack] Obama cuando dice que tenemos un gobierno ilegítimo. Es un golpe de Estado en marcha”, aseveró.
Padrino puntualizó que las “armas de la nación no son ni para reprimir al pueblo, ni para ir contra él, ni para dar golpes de Estado o desplazar funciones e instituciones en el país”.
En una entrevista con el canal privado Televén, calificó de “apreciación errática, desproporcionada, perversa, mezquina y tendenciosa”, el argumento de sectores de la oposición respecto a que el presidente Nicolás Maduro sigue en el poder por los militares y por el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ).
“El gobierno se sostiene por la elección popular”, alegó al referirse a que Maduro fue elegido por voto popular y este mes cumplió tres años de su mandato.
Entretanto, la Organización de los Estados Americanos (OEA) anunció que está a la espera de que la oposición venezolana presente la solicitud para aplicar la Carta Democrática Interamericana al país, algo que sólo se hizo en el golpe de Estado en Honduras, de 2009.
“Venezuela ha contravenido principios básicos establecidos en la Carta Democrática, por ejemplo, que los elementos esenciales de la democracia representativa incluyen la separación e independencia de los poderes públicos”, consideró José Miguel Vivanco, director para América de la ONG Human Rights Watch.
“La absoluta falta de independencia judicial ha permitido que el Tribunal Supremo en repetidas ocasiones limitara las facultades de la actual Asamblea Nacional”, agregó Vivanco.