Unas 500 personas asentadas en áreas cercadas en Siria comenzaron ayer a ser evacuadas por Naciones Unidas, afirmó el portavoz de la ONU Stephane Dujarric.
“Hay planes en marcha para evacuar a unas 500 personas, incluyendo a los enfermos, heridos y sus familiares, de cuatro pueblos cercados, Foua, Kefraya, Madaya y Zabadani, que necesitan atención médica urgente que les salve la vida”, dijo Dujarric.
La mayoría de los traslados se realizaban por tierra y no hay plazo de finalización.
Foua y Kefraya, en la provincia de Idlib, de mayoría chiíta y leal al régimen, están asediadas por los rebeldes sirios, mientras que Zabadani y Madaya, de mayoría sunita, están cercadas por las fuerzas gubernamentales del presidente Bashar al-Assad.
El desalojo fue posible gracias a la mediación de la Media Luna Roja Árabe de Siria y el auspicio de la ONU, según dijo el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).
Un total de 4 millones y medio de personas residen en zonas de difícil acceso en Siria, entre ellas 400 mil que habitan en áreas cercadas, bien por el régimen o la oposición.
El 17 de marzo, varios convoyes con ayuda humanitaria entraron a esas cuatro localidades.
El Observatorio advirtió además que tras sufrir varios reveses en el plano militar, la milicia terrorista del Estado Islámico (EI) logró ampliar ayer nuevamente su dominio sobre el este de Siria. Los extremistas conquistaron un territorio industrial que era controlado por fuerzas del régimen en la ciudad de Dair-as-Saur.
El régimen controla en la ciudad del mismo nombre solamente un enclave donde se ubica la terminal aérea. Según cifras de la ONU, allí se encuentran encerradas unas 200 mil personas.
Las fuerzas del régimen incrementaron su bombardeo aéreo de zonas del norte y noroeste de Siria controlada por el Frente al-Nusra, con vinculaciones con Al-Qaeda, y rebeldes respaldados por Occidente, apuntó el Observatorio. El número de civiles que murieron el martes en ataques aéreos en Siria aumentó a 66, el mayor número en un solo día desde que entró en vigor la tregua parcial a finales de febrero, según el OSDH.
Entre las víctimas mortales hay también cinco niños. Opositores al régimen de Al-Assad responsabilizan de los bombardeos a la Fuerza Aérea siria.
En Estados Unidos, el Pentágono decidió suavizar las condiciones para atacar objetivos sobre el terreno en Irak y Siria, a fin de delegar más en comandantes de menor rango y agilizar las operaciones contra el EI.