Las autoridades ecuatorianas desplegaron a 10 mil miembros de las Fuerzas Armadas para asistir en las tareas de rescate y mantener el orden público tras un fuerte terremoto registrado al anochecer del sábado en la costa pacífica del país.
El terremoto tuvo su epicentro en una zona poco poblada de pueblos pesqueros y playas turísticas, unos 170 kilómetros (105 millas) al nordeste de la capital, Quito.
También se enviaron 300 bomberos extra para la golpeada provincia de Manabí y otros 200 a Pedernales, señaló la Secretaría de gestión de Riesgos indicó en un comunicado. Además se decretó el desplazamiento de 3 mil 500 agentes a las zonas de Manabí, Esmeraldas, Guayas y Santa Elena.
El gobierno ecuatoriano decretó el estado de excepción tras el terremoto, que dejó al menos 77 muertos y más de 570 heridos.
lsm