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Berlín.— El gobierno alemán tiene registrados 5 mil 835 casos de menores refugiados “desaparecidos” el pasado año en el país, originarios en su mayor parte de Afganistán, Siria, Eritrea, Marruecos y Argelia, de acuerdo con datos del Ministerio del Interior difundidos ayer por el grupo de medios de comunicacion alemán Funke. La información se desprende de una respuesta parlamentaria enviada por ese organismo a la coalición política ecologista Los Verdes.
Según los datos, de los 8 mil seis casos de niños refugiados no acompañados que fueron registrados como desaparecidos en el último año, 2 mil 171 aparecieron de nuevo. Entre los 5 mil 835 que no se sabe dónde están, el mismo informe estima que 555 son menores de 14 años. El organismo no ofreció detalles sobre los posibles motivos del problema, pero Los Verdes alertaron de los riesgos tras esas “alarmantes cifras”.
La diputada ecologista Luise Amts- berg instó al gobierno de Angela Merkel a actuar al considerar que no está tomando en serio “el riesgo de la prostitución forzada o de la explotación”. Hace apenas dos meses, la Oficina Europea de Policía (Europol) alertó sobre la desaparición de al menos 10 mil niños migrantes que viajaban solos, ocurrida durante los últimos dos años tras su llegada a Europa. De acuerdo con ese organismo, este dato en sí no implica que hayan sido presa de redes de trata, dado que también está la posibilidad de que se hayan reencontrado con familiares en el país o que se hayan duplicado algunos registros, algo que el mismo gobierno alemán ha admitido como una falla en su sistema de registro de migrantes conocido como Easy.
Las autoridades de esa nación informaron que el año pasado entraron en Alemania cerca de 1.1 millones de solicitantes de asilo, dato que fue revelado a partir del sistema Easy.
El programa da cuenta de las personas quienes arribaron al país con la intención de solicitar asilo, aunque el Ejecutivo ha reconocido la imposibilidad de establecer la cifra real de refugiados en Alemania porque puede haber duplicidades y también porque se registran quienes pasan por el territorio en dirección a otras naciones.
El número de llegadas ha descendido de forma importante en los primeros meses de este año, aunque las cifras siguen siendo elevadas.
No obstante, en el mismo informe difundido por Europol a comienzos de este año se reveló que al menos 5 mil niños refugiados que habían ingresado a Italia permanecían con paradero desconocido; otros mil que llegaron a Suiza correrían con la misma suerte. Europol tiene informaciones que indican que aquellos criminales que primero se aprovecharon de los refugiados como traficantes de personas ahora también intentan venderlos como esclavos o explotarlos sexualmente.
Al respecto, el secretario general de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) y el director de Europol señalaron la necesidad de intensificar la cooperación internacional para prevenir que más niños sean presas de las redes de tráfico de personas.
Por su parte, la OSCE, que tiene una larga trayectoria en la lucha de trata de personas, señaló que está lista para asumir un rol activo en el combate a este delito.
También sigue siendo poco claro el dato de cuántos niños han perecido durante sus travesías para alcanzar tierra europea, aunque UNICEF calcula en 340 la cifra de niños muertos en naufragios en su camino a través del Mediterráneo. La organización humanitaria Save The Children estima que al menos 1.2 millones de menores carecen de asistencia en Siria.
