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El rey Felipe VI decidió ayer no convocar “por el momento” una nueva ronda de consultas con los partidos políticos para designar a un nuevo aspirante a la presidencia del gobierno, tras el fracaso la semana pasada de las dos votaciones de investidura del socialista Pedro Sánchez, quien no logró la mayoría suficiente para ser elegido. La Casa Real hizo ayer este anuncio a través de un comunicado, después de la reunión del monarca con el presidente del Congreso de los Diputados, el socialista Patxi López. El monarca argumentó su decisión para que “las formaciones puedan llevar a cabo las actuaciones que consideren convenientes a los efectos de lo previsto en el artículo 99 de la Constitución”. Es decir, para que tengan tiempo para negociar.
Según artículo 99.4 de la Constitución, si el candidato propuesto para la presidencia del gobierno no obtiene la confianza del Congreso en segunda votación por mayoría simple, tal y como ocurrió la semana pasada, “se tramitarán sucesivas propuestas" de candidatos por el mismo procedimiento que con el primer candidato. Es decir, a través de la designación del rey tras mantener una ronda de consultas con las fuerzas con representación en el Parlamento.
Por lo tanto más de dos meses y medio después de que se hayan celebrado elecciones generales en España, que tuvieron lugar el pasado 20 de diciembre, no sólo no hay un presidente del gobierno sino que ni siquiera hay una fecha para un nuevo debate de investidura puesto que los líderes políticos no han sido capaces de pactar. Sólo Pedro Sánchez y Albert Rivera han firmado un acuerdo con 200 medidas para poner en marcha. Pero PP y Podemos lo vetaron. Es decir, votaron en contra de la investidura de Sánchez para impedir que llegara a la presidencia del gobierno pese a que con la abstención de Podemos hubiera bastado. De manera que con un Parlamento tan fragmentado, y con el PP y Podemos firmes en su decisión de bloquear la investidura de Sánchez, lo más probable es que se tengan que repetir las elecciones.
Ayer Mariano Rajoy reiteró ayer su deseo de formar una gran coalición PP-PSOE presidida por él y con el apoyo de Ciudadanos. A lo que el PSOE y Ciudadanos (centro derecha) se oponen. Este último por los numerosos casos de corrupción que han surgido en las filas del PP. Rajoy anunció ayer su intención de llamar a Pedro Sánchez para iniciar una nueva ronda de conversaciones. Dijo que preferiría que el líder socialista fuera solo a la reunión. A lo que Sánchez respondió que irá con Rivera puesto que ha sido con él con quien ha firmado un acuerdo.
Por su parte Pablo Iglesias de nuevo exigió al PSOE que rompa su acuerdo con Ciudadanos para sentarse a negociar con él. Argumentó que el pacto PSOE-Ciudadanos es inaceptable porque supone una "capitulación" en materia económica y en cuestiones sustanciales para el partido. Aunque no aclaró en cuales. Y ello pese a que la mitad de los votantes de Podemos, según una encuesta de El País, no están de acuerdo en que su partido haya votado en contra de la investidura de Sánchez, y hubieran preferido una abstención. Lo que habría convertido al socialista en el nuevo presidente del gobierno y se habría evitado la celebración de nuevas elecciones.
Pedro Sánchez de nuevo exigió a Pablo Iglesias que sea “valiente” para dejar de bloquear su investidura porque con esa traición “ha traicionado a los votantes de Podemos”, denunció. “Si no tiene ese coraje, que nos deje liderar ese cambio, que no bloquee”, explicó en una rueda de prensa celebrada en la sede de su partido.
De los 350 escaños que hay en el Congreso de los Diputados, el PP tiene 123 diputados, el PSOE 90, Podemos 69 y Ciudadanos 40. Para lograr mayoría simple son necesarios más sies que noes. Por lo tanto para que PP o PSOE logren formar gobierno es necesario que PP pacte con Ciudadanos y que el PSOE o Podemos se abstengan (cosa que ya han dicho que no harán), que el PSOE pacte con Ciudadanos y que el PP o Podemos se abstegan (cosa que la semana pasada no ocurrió), o que el PSOE pacte con Podemos y que el PP y Ciudadanos se abstengan (algo que no están dispuestos a hacer).
