El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, llegó hoy a la Casa Rosada para reunirse con su colega argentino, Mauricio Macri, en el inicio de la intensa agenda de trabajo que sostendrá este miércoles en Buenos Aires.
Obama viajó en auto oficial desde el barrio de Palermo hasta el centro de la ciudad, custodiado por una fuerte comitiva de seguridad, ya que Argentina elevó el nivel de alerta después de los ataques terroristas sufridos la víspera en Bélgica.
El Premio Nobel de la Paz fue recibido por Macri en la explanada de la sede presidencial y después ambos ingresaron para sostener una reunión privada.
Al término de la cita bilateral, los dos mandatarios encabezarán otro encuentro acompañados por sus respectivos equipos de trabajo y finalmente ofrecerán una rueda de prensa conjunta.
Una vez terminadas las actividades en Casa Rosada, Obama caminará hacia la Catedral Metropolitana, ubicada a dos cuadras, para depositar una ofrenda floral en homenaje al libertador José de San Martín.
Más tarde, Obama encabezará un encuentro con organizaciones de la sociedad civil en el centro cultural La Usina, ubicado en el popular barrio de La Boca, en donde responderá preguntas del público.
La agenda continuará con su presentación en el encuentro de la Cámara de Comercio Estados Unidos-Argentina, misma que ya evaluó que el comercio bilateral, que actualmente es deficitario para el país sudamericano, podría triplicarse gracias a este nuevo acercamiento entre ambos países.
Por la noche, Obama acudirá al Centro Cultural Kirchner, en donde Macri lo homenajeará con una cena de gala a la que fueron convocados 400 invitados.
El presidente estadunidense arribó esta madrugada a la capital argentina procedente de La Habana, acompañado por su esposa, Michelle Obama, sus hijas Malia y Sasha y su suegra, Marian Robinson.
En cuanto descendió del Air Force One fue recibido por la canciller argentina, Susana Malcorra, y después se dirigió junto con su familia al lujoso Palacio Bosch, residencial del embajador de Estados Unidos ubicada en el barrio de Palermo y en donde se hospedará durante las dos noches que permanecerá en esta ciudad.
El mandatario llegó con una comitiva de más de 800 personas, entre las que destacan 400 empresarios que analizarán oportunidades de inversión en Argentina, uno de los aspectos centrales para el gobierno argentino.
Mañana, justo en la fecha en que se cumplen 40 años del último golpe militar de Argentina, y que fue apoyado por Estados Unidos, Obama y Macri realizarán un acto en el Parque de la Memoria para homenajear a las víctimas del sangriento régimen de facto.
Obama y su familia abordarán de inmediato un vuelo que los trasladará a la patagónica ciudad de Bariloche, en una jornada de descanso que se programó para evitar las multitudinarias marchas de conmemoración por la dictadura en Buenos Aires y en donde habrá muestras de repudio hacia Estados Unidos.
Macri también viajará a Bariloche para acompañar a Obama, quien por la noche emprenderá el regreso a Washington.
Tanto en Buenos Aires como en Bariloche, el presidente será custodiado por un operativo de seguridad conjunto entre el Servicio Secreto de Estados Unidos y fuerzas de seguridad de Argentina, que incluirá a unos tres mil efectivos.
