El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, asistirá al partido amistoso de beisbol entre Los Rays de Tampa (Florida) y el equipo nacional de Cuba durante su visita a la isla entre el 21 y 22 de marzo, según informó uno de sus asesores.
En un mensaje en su cuenta de Twitter, el asesor adjunto de seguridad nacional de Obama, Ben Rhodes, anunció que el mandatario presenciará el partido, que se disputará el 22 de marzo en el estadio Latinoamericano de La Habana.
"Estamos muy contentos de fortalecer los lazos entre nuestros países a través de nuestro amor y pasión por el juego del beisbol", comentó Rhodes, que fue uno de los negociadores de los diálogos secretos previos a la normalización bilateral entre EU y Cuba.
Uno de los objetivos de esa normalización es fomentar "lazos más fuertes entre cubanos y estadounidenses - compartimos el amor por el beisbol", agregó el asesor.
Al confirmar hoy la celebración del partido en La Habana, el equipo de la Bahía de Tampa, en la costa oeste de Florida, señaló que se trata de la primera visita de un equipo de las Grandes Ligas de EU (MLB, por su sigla en inglés) a la isla desde 1999, cuando los Orioles de Baltimore jugaron un amistoso con el equipo local.
"Los Rays están extremadamente orgullosos de representar a las Grandes Ligas en un viaje que será tan memorable y significativo para los dos países que veneran nuestro gran deporte", expresó el propietario mayoritario del equipo, Stuart Sternberg.
El conjunto fue elegido por sorteo entre varios equipos de las Grandes Ligas que estaban interesados en participar, según un comunicado de la organización.
Para garantizar la calidad del partido, las autoridades cubanas han acometido varias obras en el estadio Latinoamericano, la sede principal del béisbol en Cuba y que dentro de unos meses cumplirá 70 años.
Obama realizará del 21 al 22 de marzo un histórico viaje a Cuba, el primero de un mandatario estadounidense en ejercicio a la isla en 88 años, con la meta de ampliar los avances logrados con la normalización bilateral e incidir en las mejoras pendientes sobre los derechos humanos, según ha adelantado la Casa Blanca.
El mandatario viajará a la isla acompañado por su mujer, Michelle, y prevé mantener reuniones con el presidente cubano, Raúl Castro, y con disidentes y miembros de la sociedad civil.
El proceso de normalización de las relaciones bilaterales iniciado en diciembre de 2014 ha llevado a la reapertura de las embajadas en La Habana y Washington, así como a la firma de un acuerdo que permitirá una conexión regular de vuelos comerciales entre ambos países por primera vez en más de cinco décadas, entre otros avances.
ahd