Bogotá.— El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, ordenó ayer a las fuerzas militares y policía intensificar las acciones contra la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) horas después de que sus integrantes atacaron una sede militar en Arauca, en el noreste del país.
Ayer, integrantes del ELN atacaron con explosivos la sede militar, en un hecho que no dejó víctimas y sólo daños leves a las instalaciones de la brigada y a tres vehículos oficiales, según los informes castrenses.
“He ordenado a [Ministerio de] Defensa intensificar las acciones en contra del ELN en la zona”, aseguró Santos al término de un consejo de seguridad en Arauca. Ofreció una recompensa de hasta 100 millones de pesos por información que permita la ubicación de los autores del atentado.
Respecto de una eventual negociación con esa guerrilla, enfatizó que “se equivoca el ELN si cree que con ataques [como el de Arauca] está allanando el camino hacia la paz”. Para iniciar cualquier negociación, insistió, la guerrilla debe liberar al militar Jair de Jesús Villar, y al civil Ramón José Cabrales. El comandante del Ejército, general Alberto Mejía, indicó que dos sospechosos fueron capturados por los hechos de Arauca.
En junio de 2014, el gobierno de Santos y el ELN anunciaron que se encontraban en la fase exploratoria para eventualmente formalizar un proceso de paz. Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) advirtieron ayer que la paz en el país estaría “incompleta” sin el ELN.
La semana pasada el jefe de la delegación del gobierno en los diálogos con el ELN, Frank Pearl, hizo hincapié en que al grupo insurgente “se le está acabando el tiempo para hacer parte de la solución política al conflicto armado en Colombia”. El grupo rebelde ha sugerido que es el gobierno el que ha dilatado las fechas.
También ayer Santos insistió en que los acuerdos de paz que se firmen en La Habana serán sometidos a plebiscito “les guste o no a las FARC”, que insistieron en rechazarlo por considerar que “no es no la vía adecuada”.