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El presidente de Zimbabue, Robert Mugabe, declaró hoy el estado de emergencia por la fuerte sequía provocada por el fenómeno de El Niño, que ha acabado con gran parte de las cosechas del país y ha disparado la alarma en las zonas rurales.
"Dada la magnitud del impacto de El Niño y de la continúa amenaza de sequía, el presidente ha declarado el estado de emergencia en las zonas rurales más gravemente afectadas", declaró el ministro de Gobierno Local, Saviour Kasukuwere.
La declaración supone un alivio para los 60 distritos rurales del país, que concentran a 2,4 millones de personas -26% de la población-, ya que la medida agilizará el envío de ayuda humanitaria al país.
Las provincias meridionales de Masvingo y Matabeleland Sur, cerca de la frontera con Sudáfrica, han perdido entre el 65% y 75% de las cosechas de maíz previstas para la primera mitad del año.
A finales de enero, el Banco de Central de Zimbabue pidió un préstamo de 200 millones de dólares para importar alimentos, pero la severidad de la sequía, unida a la limitada capacidad financiera del país, obligarán al Gobierno de Mugabe a pedir ayuda a la comunidad internacional.
Más de 16.000 cabezas de ganados han muerto de hambre en las últimas semanas debido a la insuficiencia de precipitaciones en el 95% del país durante la temporada estival de lluvias, que va de noviembre a marzo, añadió Kasukuwere.
El ex primer ministro y líder opositor del Movimiento para el Cambio Democrático (MDC, en sus siglas en inglés), David Coltart, criticó a Mugabe por la tardanza en declarar el estado de emergencia y recordó que su partido hacía semanas que lo reclamaba.
lsm
