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La presidenta Dilma Rousseff dijo el miércoles que el virus del zika ha pasado de una "pesadilla distante" a una "amenaza real" contra el pueblo brasileño.
En un mensaje pregrabado en el horario estelar de la televisión, Rousseff llamó a los ciudadanos a unirse para combatir el mosquito que transmite el virus, el cual los investigadores aquí han vinculado a un inusual defecto de nacimiento. Describió medidas concretas que la gente puede tomar para eliminar los criaderos del mosquito en sus hogares.
"Con la ayuda del pueblo vamos a probar, una vez más, que Brasil es fuerte y no será vencido por un mosquito dijo la mandataria durante el mensaje.
También tuvo "palabras de consuelo" para las mujeres que han dado a luz a bebés con el defecto cerebral microcefalia.
"Haremos todo, absolutamente todo, para protegerlos", prometió.
Afirmó que el gobierno se ha movilizado para desarrollar una vacuna, pero insistió en que en tanto no esté lista, el mejor curso de acción sigue siendo prevenir la reproducción del mosquito.
Confirmó que el Ejecutivo está "negociando" con distintos laboratorios farmacéuticos, así como con las autoridades estadounidenses, con el objetivo de desarrollar una vacuna contra el zika.
La presidenta brasileña volvió a hacer un llamado al pueblo para evitar una "derrota", que dependerá, según comentó, de la "determinación a la hora de eliminar los criaderos de larvas".
Con este objetivo claro, el Gobierno "está destinando todos los recursos financieros, tecnológicos y humanos necesarios a esta lucha en defensa de la vida", afirmó Rousseff, quien recordó que el próximo día 13, será llevada a cabo una operación de lucha contra el mosquito en la que participarán 220 mil miembros de las Fuerzas Armadas.
El último informe oficial, divulgado este martes, establecía un incremento del 14% de los casos de microcefalia en recién nacidos, una malformación asociada al virus del Zika, en una semana en el país hasta llegar a los cuatro mil 783 casos.
El Ministerio de Salud indicó que ha confirmado 404 casos de microcefalia y ha descartado otros 709, por lo que la situación de tres mil 670 pacientes continúa en investigación.
ahd
