Más Información
Patricia Aguayo, vocera de trabajadores del PJ, se postulará como magistrada; verificará que no haya “mano negra”
“México ha dejado de ser un Estado de derecho", dice catedrático de universidad en España; critica reforma judicial
PAN oficializa en Senado la desincorporación de Yunes Márquez; Mesa Directiva seguirá con el trámite
Decenas de centroamericanos exigieron mejores condiciones migratorias ante la Casa Blanca, en donde el vicepresidente de Estados Unidos, Joseph Biden, tiene previsto reunirse hoy con los presidentes Salvador Sánchez Cerén (El Salvador), Jimmy Morales (Guatemala) y Juan Orlando Hernández (Honduras).
Con gritos y pancartas, los manifestantes reclamaron a EU un Estatus de Protección Temporal (TPS), un permiso que las autoridades estadounidenses conceden de forma extraordinaria a los nacionales de países afectados por conflictos bélicos o desastres naturales y que algunos inmigrantes centroamericanos reclaman desde hace años.
"La violencia es demasiado fuerte. Si no pagas la renta te matan a un familiar. Es pobreza y violencia, ambas cosas de la mano, lo que hace que uno se decida a emigrar", explicó a Efe la hondureña Aurora Villatoro, de 25 años, y que llegó a EU en 2008 de forma ilegal y permanece indocumentada.
Con letreros pintados a mano en los que podía leerse "TPS ahora", el medio centenar de centroamericanos aprovechó la visita de sus presidentes a Washington para, a la luz de las cámaras, lanzar consignas como: "¡Biden, escucha, estamos en la lucha!" y "Aquí estamos y no nos vamos, no nos echan porque luchamos".
Entre los manifestantes destacaba un grupo de hondureños con discapacidad, que trataron de llegar a EU saltando al tejado del tren conocido como "La Bestia", que cruza México y es conocido por sus mortales hierros y las bandas de narcotráfico que se ocultan amenazantes entre sus vagones.
"Cuando inicié mi camino, no pude llegar hasta EU porque caí del tren y perdí parte de mi cuerpo. Regresé a Honduras sin parte de mi cuerpo, pero decidí volver para luchar por mi familia, para que mis tres hijos tengan una vida mejor. Hay una delincuencia tremenda en nuestro país", dijo a Efe José Alfredo Correa Santos.
Como la otra decena de hondureños discapacitados, Correa Santos dejó en Honduras a su familia y llegó a EU con un permiso de asilo político para reclamar ayuda al presidente Barack Obama.
"Vamos a seguir peleando por nosotros y por los que se tiraron al tren y no sobrevivieron. Por los cientos de centroamericanos cuyos restos mortales no pudieron ser reconocidos ni por sus familias. A nosotros nos cortaron un brazo o una pierna, pero sobrevivimos", añadió Correa Santos, a quien el tren dañó las piernas.
Bajo el amparo del TPS, medida temporal migratoria que incluye un permiso de trabajo, se encuentran actualmente Nicaragua, El Salvador y Honduras, entre otros, aunque con extensiones que otorgan de forma periódica las autoridades estadounidenses.
Guatemala lleva pidiendo a Estados Unidos desde hace años que otorgue a los guatemaltecos que viven en el país (alrededor de 1.5 millones) el TPS.
El Gobierno de EU evaluó durante un tiempo la petición de Guatemala, pero decidió suspenderla en 2013 mientras se debatía una reforma migratoria, que el Congreso finalmente no aprobó, lo que obligó a Obama, a decretar la regularización de cinco de los 11 millones de indocumentados que viven en el país.
Estos beneficios migratorios no llegaron a entrar en vigor y el Tribunal Supremo deberá decidir sobre ellos en junio.
Los inmigrantes de otros países de Centroamérica, como El Salvador (que sufrió un terremoto en 2001), pueden recibir esta medida temporal migratoria que incluye un permiso de trabajo y es revisada por las autoridades de EU tras un periodo de tiempo.
El Gobierno de Estados Unidos también otorgó el TPS a Honduras y a Nicaragua bajo el mandato del presidente demócrata Bill Clinton, después de que el huracán "Mitch" dejara graves daños y cientos de miles de damnificados en esos países en 1998.
ae