El presidente de Francia, François Hollande, recibió ayer con altos honores a su homólogo cubano, Raúl Castro, en una histórica visita que escenificó en París el acercamiento entre ambos países.
“Queremos acompañar a Cuba en el camino que ha elegido: apertura y desarrollo”, dijo Hollande en el Palacio del Elíseo, donde compareció acompañado por su par cubano.
Raúl Castro, el primer jefe de Estado cubano que visita Francia desde 1995, fue recibido ayer con honores militares en París, un gesto que le permaneció vedado hace 21 años a su hermano, el ex presidente Fidel Castro. Francia se ha puesto desde hace meses a la vanguardia del acercamiento de la Unión Europea (UE) con Cuba, tras años de enfriamiento en las relaciones bilaterales.
Hollande exigió también el levantamiento del embargo estadounidense contra la isla caribeña e instó ayer a su homólogo estadounidense, Barack Obama, a “ir hasta el final” para acabar con ese “vestigio de la Guerra Fría”, que es el embargo comercial sobre Cuba.
En una declaración a la prensa junto a Castro, Hollande consideró que pese a los “progresos” realizados por Estados Unidos, todavía queda por “eliminar” el bloqueo.
“Obama, que ha hecho numerosos gestos, debe, como él mismo ha dicho, ir hasta el final y permitir que este vestigio de la Guerra Fría termine”, dijo.
Tras la intervención de Hollande, Castro, en visita de Estado a Francia hasta hoy, agradeció al presidente galo su mensaje contra el embargo y por ejercer un “papel de liderazgo” en las relaciones entre la isla y la Unión Europea.
“Francia es un importante socio para Cuba. Somos dos naciones con realidades históricas y culturales diferentes, pero nuestras relaciones son de amistad”, expresó Castro.
El líder cubano enfatizó que se ha abierto “una nueva etapa” en las relaciones económicas entre ambos países, especialmente tras el reciente acuerdo con el Club de París para reestructurar una deuda de 11 mil 100 millones de dólares (de los cuales más de 4 mil millones correspondían a Francia) en cesación de pagos desde 1986.
Ambos países suscribieron otro acuerdo por el que se destinarán 231 millones de dólares adeudados a un fondo franco-cubano que servirá para financiar proyectos de desarrollo en
la isla. En total, se rubricaron en el Elíseo seis acuerdos bilaterales en campos como la economía, el turismo, el comercio justo, el transporte ferroviario o la ayuda al desarrollo. Tras felicitar a Francia por la exitosa organización de la Cumbre del Clima, Castro anunció que el próximo mes de mayo se celebrará el primer mes de la cultura cubana en Francia y de la cultura francesa en Cuba.
La ministra de Medio Ambiente francesa, Ségolène Royal, fue la encargada de recibir primero a Castro en el Arco del Triunfo parisino. En la noche, los mandatarios asisitieron a una cena de gala oficial ofrecida en honor del presidente cubano. Hoy, Castro se reunirá con el primer ministro Manuel Valls y la alcaldesa de París Anne Hidalgo. También visitará el Musee de l’Homme. La delegación cubana también se reunirá con líderes empresariales y con el jefe de la Unesco.
Castro, de 84 años, se encuentra en su primer viaje oficial a Europa desde que asumió el cargo ejercido por su hermano Fidel en 2006. El presidente cubano hizo una escala breve el año pasado para reunirse con el Papa.
Las empresas francesas buscan oportunidades de negocios en Cuba. El turismo en la isla ha aumentado desde el año pasado cuando se anunció la normalización de relaciones diplomáticas con Estados Unidos. El número de visitantes franceses aumentó en 2015 en 30% comparado a los años previos.
