La policía belga desmanteló una red internacional de tráfico de personas responsable de la entrada ilegal de al menos tres mil inmigrantes en el Reino Unido, informan hoy los medios locales.
El grupo criminal estaría compuesto de ciudadanos de origen kurdo e iraquí y operaba a partir de Bélgica, facilitando el trayecto de cerca de veinte personas al día.
Los migrantes pagaban dos mil euros para cruzar el Canal de la Mancha escondidos en camiones de transporte de mercancía.
Desde que empezaron las investigaciones, en mayo de 2015, diez miembros de la red han sido detenidos.
Los dos presuntos líderes fueron detenidos el viernes en Reino Unido y esperan la extradición.
Según las autoridades, se trata de la mayor banda de traficante de personas ya desmantelada en Bélgica.
lsm