En un intento por transmitir tranquilidad a sus ciudadanos tras el ataque terrorista que costó la vida a 14 personas en San Bernardino, California, el presidente Barack Obama compareció anoche para asegurar que, a pesar de que la amenaza terrorista ha evolucionado, para transformarse en actos de violencia cada vez más más dirigidos, Estados Unidos “prevalecerá y conseguirá derrotar a la amenaza del Estado Islámico (EI)”.
Obama calificó anoche el tiroteo de San Bernardino (California), que causó 14 muertos y 21 heridos el pasado miércoles, como “un acto de terrorismo” dirigido a “matar gente inocente”.
“En los últimos años la amenaza terrorista ha entrado en una nueva fase. A medida que nos hemos convertido en un Estado más eficaz para prevenir ataques multifacéticos complejos como el del 11 de septiembre de 2001, los extremistas han recurrido a menos complicados actos de violencia y a más tiroteos indiscriminados que son muy comunes en nuestra sociedad”, dijo Obama. Además, en un nuevo llamado al Congreso, el mandatario urgió a demócratas y a republicanos a endurecer los controles para la compra y venta de armas de fuego.
“La verdad es que, sin importar lo eficaces que puedan ser nuestras agencias de inteligencia y fuerzas policiales, es prácticamente imposible que puedan identificar a todos los aspirantes a convertirse a asesinos en serie motivados por el Estado Islámico o alguna otra ideología de odio”, declaró.
La comparecencia de Obama, desde el Despacho Oval desde la Casa Blanca, le permitió reiterar que mantendrá su actual estrategia para derrotar al EI mediante una campaña de bombardeos a la que han decidido sumarse Francia, Reino Unido y Alemania.
Advirtió, sin embargo, que lo que no esta dispuesto a hacer es desplegar más tropas de Estados Unidos. “No vamos a mandar a otra generación de estadounidenses para combatir y morir en suelo extranjero durante otra década”, enfatizó.
También, insistió en la importancia de evitar que esta batalla contra el yihadismo sea definida como una guerra entre Estados Unidos y el Islam. “Eso es lo que quieren los matones y asesinos del EI. Pero ellos no hablan por el Islam. Ellos sólo representan a una mínima fracción de más mil millones de musulmanes en todo el mundo. Estoy confiado en que venceremos porque estamos del lado correcto de la historia”, dijo.