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Washington. — En un intento por volver a la cima de las encuestas y recuperar sus expectativas presidenciables, el aspirante republicano Donald Trump presentó ayer su nuevo libro Crippled America (EU incapacitado), una suerte de manifiesto político en el que defiende la necesidad de construir un muro fronterizo con México y obligar a su vecino del sur a pagarlo mediante la confiscación de remesas, el aumento de cuotas fronterizas o el costo de las visas temporales.
“De una u otra forma van a pagarlo”, asegura Trump en el capítulo de la inmigración indocumentada, titulado “Los buenos muros hacen buenos vecinos”. “El flujo de inmigrantes ilegales a este país es uno de los más serios problemas que enfrentamos. Nos está matando”, asegura Trump al sugerir que, en caso de conquistar la presidencia de EU, la ampliación del muro con México, con más de mil 600 kilómetros adicionales, tendría que comenzar “lo más pronto posible”.
“Y quiero ser muy claro: México tendrá que pagarlo… ¿Cómo?... Podríamos aumentar las cuotas fronterizas. Podríamos aumentar el costo de las visas temporales. Podríamos incluso confiscar las remesas [de EU a México] que se derivan de salarios devengados ilegalmente”, dice Trump.
“Los malos vienen de otros países, no sólo de México. Vienen de toda Centroamérica y América del Sur y probablemente vienen de Medio Oriente”, justifica.
La propuesta de Trump ha encontrado gran aceptación entre la base más conservadora a pesar de que la inmigración que llega desde territorio mexicano se ha desplomado en los últimos 15 años. Según estadísticas de la Patrulla Fronteriza, en 2014 el número de mexicanos detenidos en la frontera fue de 229 mil 178 personas. En el año 2000, la cifra fue de 1.6 millones.
El libro de Trump, un texto de casi 200 páginas sin pretensiones literarias, es un conjunto de frases hechas. En él, se presenta como el hombre indispensable, el hombre de empresa que sería capaz de restaurar el liderazgo de EU en todo el mundo.
“En contra de lo que dicen los que hacen bromas a mi costa, no creo que la Casa Blanca necesite luces de neón sobre el tejado o de alas adicionales. Creo, sin embargo, que lo que necesita la Casa Blanca es experiencia empresarial”, asegura Trump al elaborar el retrato hablado de sí mismo para ocupar la oficina oval.
“Muchas de las lecciones que he aprendido en el mundo de los negocios son aplicables a la actual situación en EU”, subraya Trump, para luego agregar que “la gente que ha hecho negocios conmigo puede dejar constancia de que soy un hombre de palabra. Y saben también que no pueden cometer el error de pensar que pueden meterse conmigo o hacerme bullying”.
Ataca a rivales. En rueda de prensa, en las Torres Trump en Manhattan, Donald Trump aprovechó el lanzamiento de su libro para irse contra la yugular de sus principales adversarios. Entre ellos, el médico neurocirujano Ben Carson, quien se ha colocado a la cabeza de las encuestas a nivel nacional y en el estado de Iowa.
“Ben es muy débil en sus propuestas de inmigración ilegal”, aseguró Trump, quien ayer amaneció con 23% de respaldo entre la base republicana, frente al 29% de Ben Carson, de acuerdo con la encuesta de The Wall Street Journal.
Otro de sus blancos elegidos ayer fue el senador por Florida, Marco Rubio, quien ha conseguido ganar tracción en las encuestas para colocarse en la tercera posición.
“Marco Rubio es un político que como líder es muy poco recomendable. Ha vivido muy por encima de sus posibilidades y es un desastre con sus tarjetas de crédito”, señaló.
Sobre Jeb Bush, Trump dijo durante el programa de televisión Good Morning America, poco antes de presentar su libro, que “no va conseguirlo. Está desperdiciando su tiempo y su dinero. Creo que ha llegado el momento de retirarse para Jeb Bush”.
Ayer mismo, organizaciones hispanas y pro reforma migratoria dijeron que entregarán hoy más de 460 mil firmas a los directivos de la cadena de televisión NBC pidiéndoles que cancelen la invitación a Trump para presentar el programa de humor “Saturday Night Live” (SNL) el próximo 7 de noviembre.
“El racismo no es divertido”, señalaron. Trump dijo que estas protestas harán aumentar “los niveles de audiencia... el programa será uno de los que tenga mayores niveles de audiencia”.
Por otra parte, la cadena Univision anunció que transmitirá, el 9 de marzo de 2016, el último debate de los candidatos demócratas a la presidencia, orientado a captar la atención y el eventual voto de la comunidad hispana. Con información de agencias