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El candidato de centro-derecha Mauricio Macri se impuso en las elecciones presidenciales de Argentina, dijeron el domingo sondeos a boca de urna de medios privados, mientras se esperaban los resultados oficiales de la elección en la que se juega la profundidad de los cambios al modelo económico del país.
Sin difundir cifras, los canales de televisión C5N, América, Crónica TV y los diarios Clarín y La Nación dieron por ganador al empresario que, de confirmarse el resultado, desplazaría del poder al peronismo de centro-izquierda que gobierna Argentina desde hace 12 años.
"Estamos muy pero muy felices con lo que ha pasado hoy en la Argentina", dijo Marcos Peña, jefe de campaña de la alianza Cambiemos, frente a los eufóricos seguidores de Macri y cuidándose de dar datos concretos porque la ley impide difundir cifras hasta las 21:00 hora local (24:00 GMT).
Impulsado por el cansancio de muchos argentinos con el estilo beligerante del oficialismo de centro-izquierda, el estancamiento económico y la alta inflación, Macri, un ingeniero que gobierna la capital Buenos Aires, habría obtenido las riendas de la tercera mayor economía de Latinoamérica.
"Esto parece un sueño (...), se viene otra Argentina, mejor en todo sentido. Tenemos una oportunidad única para demostrar, desde los errores del kirchnerismo (oficialismo), cómo se puede construir un país transparente en todo sentido", dijo a Reuters Ángela Torres, una médica de 43 años.
Con su propuesta de renovación de la política y combate a la corrupción, Macri, un ingeniero de 56 años, consiguió un amplio apoyo de los votantes pese a carecer de una gran estructura partidaria. En la primera ronda de octubre, sorprendió a propios y ajenos al quedar solo tres puntos detrás del claro favorito, Daniel Scioli, un ex campeón de motonáutica de 58 años.
Pero el domingo en el cuartel de campaña de Scioli una fuente de su equipo admitió que las primeras cifras preliminares que manejaban no le favorecían. Muchos se veían desanimados.
"Hay que ser prudentes y esperar, porque los (sondeos a) boca de urna ya se equivocaron la vez pasada", dijo la fuente a Reuters en alusión a la menor cantidad de votos que los sondeos le otorgaban a Macri en la primera ronda electoral.
Scioli, un peronista que gobierna la provincia de Buenos Aires, apostaba a seducir a quienes querían un cambio frente a la gestión de la presidenta saliente Cristina Fernández pero temían que Macri aplique viejas recetas económicas neoliberales que traen malos recuerdos a los argentinos.
"Es muy temprano, todavía tengo esperanzas de que se dé vuelta el resultado. Pero si sigue así, realmente es un retroceso para el país", afirmó María Rosa Soria, una empleada de 44 años.
Las primeras cifras oficiales comenzarían a difundirse a partir de las 19:30 hora local (22:30 GMT).
COINCIDENCIAS
Quien sea que finalmente se consagre tendrá que reactivar una economía estancada por la escasez de inversiones, controlar una alta inflación y reducir los niveles de inseguridad cuando asuma el 10 de diciembre.
Todo indica que el país girará hacia políticas más amigables con los mercados gracias a la victoria de su candidato preferido, luego de 12 años de fuerte intervención estatal, controles cambiarios y restricciones comerciales.
Aunque originalmente proponía la apertura irrestricta de los mercados y austeridad fiscal, Macri tuvo que prometer que mantendrá los subsidios a los más pobres y la gestión estatal de la petrolera YPF, entre otras medidas, ante el apoyo que tienen algunas políticas de la centro-izquierda gobernante.
Como consecuencia de una fuerte baja de los precios de las materias primas que exporta, la economía de Argentina está estancada desde hace años después de una década de fuerte crecimiento impulsado por las ventas de granos como la soja y por un robusto mercado interno.
Aunque no dio demasiadas certezas sobre sus primeras políticas económicas, Macri ya adelantó que reduciría un cuestionado impuesto que grava los salarios altos y medios y la tasa a las exportaciones agrícolas, las principales fuentes de divisas del país.
Además dijo que buscará fortalecer las bajas reservas del Banco Central con un fuerte ingreso de divisas al país, devaluar el peso local e iniciar negociaciones con acreedores de deuda impaga que están trabando el acceso del país a financiamiento internacional.
Con un Congreso dividido y el poderoso peronismo en la oposición, una fuente del equipo de Macri dijo que si es consagrado como presidente, convocará a un diálogo amplio con gobernadores y representantes del actual oficialismo.
mvl