El Cairo.— El Comité de Aviación Interestatal (CAI) de Rusia afirmó ayer que el avión de pasajeros que se accidentó el sábado en la península egipcia del Sinaí, con 224 personas a bordo, se desintegró en el aire.

“El avión se destruyó en el aire y sus fragmentos se encuentran dispersos en una vasta zona de unos 20 kilómetros cuadrados”, dijo el director ejecutivo del CAI, Víctor Sorochenko, tras un recorrido por la zona del siniestro.

El aeroplano, un Airbus A321-200, operado por la aerolínea Kogalymavia (MetroJet) en Moscú, se estrelló en una zona remota montañosa de la península de Sinaí.

En declaraciones a la prensa nacional e internacional, Sorochenko afirmó que aunque es demasiado pronto para hablar sobre las causas del accidente, no hay duda de que el aparato se desintegró en el aire.

El funcionario del CAI confirmó que se han encontrado alrededor de 170 cuerpos, de los 217 pasajeros y siete tripulantes que transportaba el avión, en su mayoría de nacionalidad rusa, y que las cajas negras son examinada por expertos rusos, egipcios y franceses.

Según testigos oculares, el avión, con más de 18 años de servicio, ardía en llamas antes de chocar contra la tierra a 300 kilómetros al sur de la ciudad de Al Arish, capital de la provincia egipcia del Norte de Sinaí.

El grupo islamista Península del Sinaí, considerado ala del Estado Islámico en Egipto, se responsabilizó del derribo del vuelo KGL9268 en un mensaje en Twitter, en venganza por las operaciones militares que realiza Rusia en Siria.

Pese a las afirmaciones de las autoridades rusas, el primer ministro egipcio, Sharif Ismail, dijo que los expertos habían confirmado que el avión no pudo ser derribado, ya que volaba a más de 9 mil 450 metros de altura.

Expertos de Rusia, Francia y Egipto están realizando conjuntamente la investigación de las causas del accidente. Los investigadores se encuentran examinando los restos del Airbus A321-200. Contribuyen a facilitar las labores de rescate las imágenes que se han recibido del espacio y que muestran con claridad el punto cero de la catástrofe, y las fotos tomadas por drones.

Debido a este incidente, el Kremlin colocó la bandera a media asta en señal de duelo luego de que el presidente, Vladimir Putin, declarara el domingo día de luto nacional.

Ayer el Papa envió sus condolencias a Putin, informó la Santa Sede en un comunicado. “Tras conocer con tristeza el trágico accidente del avión ruso en la península del Sinaí, Su Santidad, el papa Francisco ofrece sus condolencias al pueblo ruso”, se lee en el un telegrama firmado por el secretario de Estado Vaticano, Pietro Parolin.

Comienza repatriación de cuerpos. El proceso de repatriación de los occisos comenzó ayer con el traslado al aeropuerto de El Cairo de los cuerpos.

El ministerio egipcio de justicia indicó que se habían tomado las medidas para entregar los cadáveres a la embajada rusa en El Cairo.

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