Jerusalén.— Miles de personas participaron ayer en la ciudad cisjordana de Hebrón en el entierro de dos presuntos atacantes palestinos que fueron abatidos el mes pasado por soldados israelíes y cuyos cuerpos permanecían retenidos por el ejército.
Hebrón vivió además otro incidente de violencia el domingo cuando soldados israelíes mataron a tiros a un palestino armado con un cuchillo que trató de atacarles, dijeron autoridades militares. Ningún israelí resultó herido.
Una serie de ataques palestinos estalló a mediados de septiembre a causa de tensiones sobre un sitio sagrado en Jerusalén y desde entonces se han diseminado por todo Israel, Cisjordania y Gaza. Los ataques han estado acompañados de protestas, incluyendo choques entre palestinos lanzando piedras y soldados israelíes.
Según datos del Ministerio de Sanidad palestino y del Ejército israelí, 72 palestinos y 11 israelíes murieron en octubre pasado en la ola de violencia en Israel y los territorios ocupados palestinos.
El número de israelíes muertos es similar a los registrados durante el primer mes de la segunda Intifada palestina, en octubre de 2000, cuando fallecieron 12, según reportó el diario israelí Haaretz.
Israel devolvió ayer los cadáveres de Raed Jaradat, de 22 años, y de Mahmoud Ghneimat, de 20, a la Oficina de Coordinación y Enlace de la ANP, informó la agencia Maan. Jaradat, de la aldea de Sair, murió el 26 de octubre, y Ghneimat, de Surif, el día 22, ambos en sucesos que el ejército o la policía israelíes denunciaron como intento de apuñalamientos de sus fuerzas.
La devolución de los cuerpos se produjo dentro de un acuerdo no escrito con los dirigentes de clanes en esa zona para calmar la situación y tras una recomendación en ese sentido por parte del servicio secreto Shabak, reveló el diario israelí Yediot Aharonot.
El gobierno israelí resolvió a mediados de octubre no devolver los cadáveres de atacantes en una serie de medidas para tratar de contener la ola de violencia que comenzó hace un mes, aunque las violentas protestas en el distrito de Hebrón estos últimos días convencieron al Shabak de que era mejor devolverlos.
Los restos de ambos jóvenes fueron objeto de un homenaje militar a su salida del hospital al que habían sido trasladados, previa entrega a sus familiares para enterrarlos en sus respectivos pueblos. Israel devolvió ayer otros cinco cadáveres de adolescentes muertos en iguales circunstancias, aunque algunas de las familias desmienten que sus hijos realmente atacaran a nadie.
Nuevo requisito. La formación de los aspirantes a convertirse en diplomáticos israelíes incluirá una visita a Cisjordania y aprenderán a defender los asentamientos judíos en la zona, dijo la viceministra de Exteriores de Israel.
Tzipi Hotovely dijo a la Radio de Ejército de Israel el domingo que había iniciado los cambios en el plan de estudios para dar un mayor énfasis a los vínculos ancestrales del pueblo judío con el territorio. El temario incluirá ahora visitas obligatorias a la ciudad de David, un asentamiento judío en un vecindario tradicionalmente árabe del este de Jerusalén, capturado por Israel en la guerra de 1967. Hotovely agregó que es importante destacar que los asentamientos judíos son legales “por la ley y las costumbres”.
La comunidad internacional suele considerar que los asentamientos en tierras capturadas en la guerra de 1967 son ilegales e ilegítimos. Aunque el primer ministro Benjamin Netanyahu actúa también como canciller, es Hotovely quien supervisa el trabajo diario del departamento.