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Tras los ataques terroristas perpetrados en París, que dejaron al amenos 129 muertos y 352 heridos, el silencio ganó las calles de la Ciudad Luz, donde los comercios, restaurantes, museos y lugares públicos quedaron cerrados.
"La ciudad está de luto y se nota en las calles. Muchos lugares públicos, más bien casi todos, cerraron" dijo Rodolfo Ruz, un connacional originario de Mérida, Yucatán, y quien llevan ocho meses en París, donde realiza sus prácticas profesionales.
El joven estaba a tres kilómetros del lugar donde ocurrieron los ataques. Estuvo a punto de salir en un bar cerca del Bataclan con un grupo de mexicanos, pero al final la salida no se armó, aunque normalmente el grupo de amigos salen en estos rumbos, una zona donde la actividad nocturna es muy activa y donde se encuentran muchos bares, restaurantes y salas de concierto.
"Estaba en un bar con una amiga, cuando en la televisión se interrumpió el partido y dieron la noticia de que hubo la explosión. Eso fue lo primero, después fue el tiroteo cerca del Café République. La mitad del bar donde estaba se fue", relató Rodolfo.
"Afortunadamente todos los que conozco están fuera de peligro y nadie resultó herido ni estaban en en lugar de los atentados", agregó.
Maria, una parisina, comentó que el viernes pasó el día en la casa de su novio, pero en la noche tenía una fiesta en el departamento de unos amigos.
Todo lo que parecía ser un día normal se transformó en una pesadilla. Fue hasta cuando llegó al departamento de sus amigos que se enteró de lo ocurrido.
"Era surrealista, porque había música, pasteles de cumpleaños. Todo parecía ser una fiesta, pero todo el mundo estaba en su celular. Vehículos de policía y bomberos desfilaban, sirenas de ambulancias sonaban. Gente en la fiesta conocía personas en el Bataclan. Hoy supe que conozco muchas personas que perdieron sus amigos allí. Una amiga tiene un amigo que fue baleado en un restaurante donde era mesero. Afortunadamente sobrevivió", contó.
"Cuando llegamos al departamento donde iba a pasar la noche, recordó, vimos las noticias. Pasé una muy mala noche y desde esta mañana tengo la impresión de vivir una pesadilla. Estoy llorando esta imprudencia, pero ¿teníamos derecho de ser imprudentes?"
Al decir del embajador de México en Francia, la zona donde se encuentran el Bataclan, el Café République y el restaurante Le Petit Cambodge, donde ocurrieron los ataques terroristas, es muy popular, donde los parisinos se reúnen para comer, disfrutar de la música, tomar una cerveza.
El XI Distrito de París, donde se encuentra el Bataclan, es un barrio multicultural en el que vive gente de diferentes origines y clases sociales.
De hecho, recordó el embajador, hace unos meses la cantante mexicana Lila Downs fue a dar un concierto en el Bataclan.
Victor Ceron es originario de Toluca y se estableció en París hace nueve años. No se encontraba en la zona de la tragedia el viernes, pero señaló que había mucha policía y se oían demasiadas sirenas por todas partes.
“Hoy (ayer) todos están en shock, enojados y tristes. Varios salieron a donar sangre (para apoyar a los heridos). Hubo filas de tres a cuatro horas”, comentó el joven, quien también se sorprendió por la tranquilidad y el silencio que había en las calles de la Ciudad Luz, normalmente acostumbrada a un gran transito de personas.
