Representantes de los gobiernos de México y Francia inauguraron la Plaza Gilberto Bosques en la ciudad de Marsella, como homenaje al diplomático mexicano que salvó a miles de vidas durante la resistencia contra los nazis en la Segunda Guerra Mundial.
La Secretaria de Relaciones Exteriores (SRE) afirmó que esta plaza es un reconocimiento de las autoridades francesas a la labor del cónsul Gilberto Bosques.
Gilberto Bosques salvó cerca de 30 mil vidas al otorgar visas a quienes solicitaron trasladarse a México para escapar de la amenaza nazi.
Asimismo, expuso la Cancillería, el diplomático logró salvar republicanos españoles, judíos alemanes, italianos identificados con la resistencia, así como personas de nacionalidad polaca, yugoeslava, libanesa y de otros orígenes, discriminadas a causa de sus orígenes o de sus ideas.
En aquella época, Bosques rentó dos propiedades en Marsella donde asiló a más de dos mil personas, entre las que se encontraban niños y mujeres, hasta que él mismo fue arrestado por las autoridades alemanas en 1943.
Entre las personalidades que fueron asiladas por el cónsul figuraron los escritores Max Aub, Anna Seghers y Egon Erwin Kisch.
La ceremonia, en la que también se develó la placa que da nombre a la nueva plaza, da continuidad al homenaje que, en el mes de julio pasado, durante la visita del Presidente Enrique Peña Nieto a Francia, se realizó a Gilberto Bosques y en la que se anunció que la plaza en la cual se encuentra la Presidencia de la Región PACA, llevaría el nombre del insigne diplomático.