La ciudad de París, agobiada por 350 toneladas de colillas de cigarrillos cada año, ha resuelto sancionar a los fumadores con una nueva multa de 68 euros (76 dólares) .
A partir del jueves, cualquier persona que arroje una colilla a la acera podría recibir una multa. La municipalidad ha pedido a las empresas que ayuden a aplicar la norma — "a ampliar la lucha contra esta muestra diaria de incultura" — y ha instalado 30.000 nuevos cubos de basura con ceniceros incluidos.
Además de provocar "contaminación visual" , las colillas contienen productos tóxicos que pueden pasar a la tierra o el agua, dijo el ayuntamiento en un comunicado.
Está prohibido fumar en edificios públicos, restaurantes y bares desde 2008, pero casi el 30 % de los franceses son fumadores habituales.
jlcg