Al menos 769 personas murieron y 934 resultaron heridas el pasado jueves en la estampida producida en las afueras de la ciudad saudí de La Meca, provocada por la aglomeración de fieles que participaban en el rito musulmán de la peregrinación, informó hoy el ministro saudí de Sanidad, Jaled al Falah.
En una rueda de prensa celebrada en Riad, el ministro añadió que 704 camas y 150 ambulancias han estado al servicio de los peregrinos en la ciudad de La Meca durante la temporada de la peregrinación de este año, que cierra su edición en las próximas horas.
Además, añadió que 25 mil empleados sanitarios trabajaron para atender a los peregrinos.
Dos días después del incidente, sigue subiendo la cifra de muertos y heridos, muchas de ellos extranjeros.
Además, continúan las investigaciones para esclarecer las causas de la que es la peor catástrofe en la peregrinación hacia la ciudad santa del islam o "hach" desde 1990, cuando murieron mil 426 personas.
Mientras, se suceden los cruces de acusaciones sobre los responsables de la tragedia, sobre todo entre suníes, confesión mayoritaria en Arabia Saudí, y chiíes, de mayor presencia en Irán.
La temporada de la peregrinación de este año ha estado marcada también por la caída de una grúa el pasado día 11 en la Gran Mezquita de La Meca, lo que causó 107 muertos y 238 heridos.
La peregrinación a La Meca es uno de los cinco pilares del islam, junto a la "shahada" (profesión de fe), la limosna, la oración y el ayuno en el mes de Ramadán.
ahc