El grupo ecologista Greenpeace instaló hoy ante la sede de Shell en Londres un oso polar robótico gigante para protestar por la perforación que la empresa petrolera hace en el Ártico.
Unos sesenta ecologistas de Greenpeace transportaron de madrugada el robot, del tamaño de un autobús londinense de dos pisos y que lleva el nombre de Aurora, para pasar inadvertidos.
El grupo, cuya protesta contó con el apoyo de la actriz británica Emma Thompson, pide a la compañía que detenga la perforación en el Ártico, en una zona remota de Alaska, por considerar que coloca el área ante el peligro de un accidente y vertido de crudo.
La actriz dijo hoy a la prensa que el trabajo de Shell le rompe el corazón pues sus actividades amenazan el hábitat de los osos en el polo norte y también el de los humanos.
"Que no quede duda, nosotros somos los próximos. Es por ello que he venido aquí a la sede central. Estoy aquí para decir que no, estoy aquí para decir que esto tiene que terminar. Soy una más de los millones de personas que exigen que esta compañía se retire del Ártico" , afirmó Thompson en un mensaje leído esta mañana.
El Ártico contiene aproximadamente el 25 por ciento de las reservas mundiales de petróleo y gas y sólo ha sido accesible en tiempos recientes debido a la reducción del hielo, según los expertos, a causa del calentamiento mundial de la atmósfera.
Una portavoz de Shell dijo que la compañía "respeta el derecho de la gente a protestar contra las actividades" que lleva a cabo, pero criticó que Greenpeace optara por la protesta de hoy en vez de debatir sobre cómo reducir las emisiones de dióxido de carbono que contaminan el medio ambiente.
"Creemos que podemos desempeñar una labor importante en el desarrollo de los recursos energéticos del Ártico. Elegimos explorar allí porque contamos con la experiencia para operar de manera responsable y rentable al mismo tiempo" , añadió la portavoz.
ahd